MADRID 3 Feb. (OTR/PRESS) -
Pocas horas antes de la manifestación que convocan para este sábado el Foro de Ermua, PP y AVT -y que parece que quiere ser réplica o alternativa de la que convocaron los sindicatos y los ciudadanos ecuatorianos, tras el atentado de la Terminal 4 de Barajas-, el líder del PP ha "calentado" el ambiente, y ha replanteado sus probables eslóganes y lemas de las pancartas: Rajoy declara que intuye que han vuelto las negociaciones con Batasuna. Y que ha vuelto al diálogo..., si alguna vez lo abandonó del todo. "Intuyo que lo que está haciendo el Gobierno no se me cuenta porque saben que no me gusta", dice el líder del PP, y se supone que por ahí irán los gritos de este sábado: contra la negociación del Gobierno con ETA y Batasuna, que dan por hecha pese al atentado del 30 de diciembre en Barajas, con dos muertes.
A alimentar esa sospecha es probable que cooperen los medios y analistas o contertulios más afines al PP, que insisten en sostener que el proceso sigue. La propia Batasuna, nos cuenta 'ABC', asegura que el proceso sigue con una interlocución importante, y reconoce que el proceso sigue abierto y con nuevas bases pese a la T-4. Por su parte, el PSOE defiende las reuniones de Ibarretxe con Otegi "porque persiguen un fin noble", mientras los socialistas vascos critican al lehendakari.
Es probable que las declaraciones que ha hecho en las últimas horas el propio presidente Zapatero alimenten también esa sospecha de que sigue empeñado, contra viento y marea, en conseguir esa pacificación final con la banda y sus socios. Ha dicho Zapatero, en efecto, que no se resigna "en mantener viva la esperanza. Me siendo obligado a hacerlo" En el mismo discurso, Zapatero señaló que "el horror de la locura terrorista es la mayor de nuestras cuestiones pendientes para disfrutar en paz y en libertad en este país". Y explicó su propia "tarea histórica": "Recibí un estado debilitado, pero dejaré una España más fuerte. Muchos coincidimos en que hay una tensión política desproporcionada, pero 2006 ha sido el año en que más españoles dicen que les ha ido personalmente bien. La fortaleza de la Constitución del 78 reside en el acierto de sus contenidos y en la legitimidad de ser símbolo supremo del consenso".
Frente a esos propósitos, los convocantes de la manifestación de esta tarde de sábado van a expresar su rotundo rechazo a cualquier clase de negociación del Gobierno con ETA y con su socia Batasuna. El PP y sus socios en "esta otra política antiterrorista" tratan de recuperar la calle, de recuperar la iniciativa y de contestar la manifestación anterior, de la que prefirieron estar ausentes a pesar de las reiteradas llamadas e invitaciones... Aunque aún otras convocatorias. Por ejemplo, la que hace el obispo de Bilbao, que convoca una concentración por la paz y pide explorar caminos inéditos. Monseñor Blázquez, presidente de la Conferencia episcopal, y nada coincidente en estas tesis con Rouco o Cañizares, llama a dar pasos y seguir tareas a favor de la paz y quiere abrir caminos para lograr la paz. O como explica un titular de 'La Vanguardia': "La Iglesia se arremanga para abrir caminos inéditos que lleven al final de la violencia".
José Cavero