MADRID 18 Oct. (OTR/PRESS) -
Muchas de las pancartas hacían alusión directa al Gobierno, con imágenes del presidente Zapatero o de la vicepresidenta Fernández de la Vega, en las que se pudo leer: "Si vosotros nacisteis, porque no nos dejáis a nosotros". El grito más repetido fue "Zapatero dimisión". Por la megafonía del acto se escucharon canciones de tono vitalista. La música se intercaló con testimonios de mujeres que supuestamente abortaron y se arrepienten ahora de ello, así como de mujeres que decidieron no abortar. "No hemos querido que se adhiera ningún partido a la marcha", aseguró Benigno Blanco, presidente del Foro de la Familia, asociación que convocó la protesta contra la ley de interrupción voluntaria del embarazo.
El Partido Popular ya ha anunciado que presentará enmienda de totalidad al proyecto de ley y que probablemente acudirá al Tribunal Constitucional cuando se apruebe. Incluso ha intentado obstaculizar su tramitación en la Mesa del Congreso. No es probable que ningún diputado del PP rompa esa disciplina de voto. Celia Villalobos, que sí lo hizo cuando se votó la ley del matrimonio homosexual, rechazó ayer explicar qué hará en esta ocasión. El debate de totalidad del proyecto no está previsto que se inicie antes de noviembre y será muy difícil que pueda concluir el trámite parlamentario para entrar en vigor antes de febrero del próximo año, ya en el siguiente periodo de sesiones. El PP, además, tiene capacidad de retrasar esa tramitación pidiendo ampliaciones de los plazos de presentación de las enmiendas.
El PSOE cuenta ya con apoyos para alcanzar la mayoría absoluta que se precisa para sacar adelante el proyecto de ley. Tiene los de ERC, BNG, IU, ICV y Nafarroa Bai. Para incorporar también al PNV necesitaría hacer modificaciones como las indicadas por la vocal del Consejo General del Poder Judicial, Margarita Uría, para que los padres de menores de edad (16 y 17 años) sean informados del aborto de sus hijas, o para precisar más los supuestos y la objeción de conciencia, entre otros. En los últimos días, los socialistas han mantenido contactos informales con esos grupos y han constatado su resistencia a introducir esas modificaciones. Incluso, algunos partidos han planteado modificaciones para ir más allá, como ERC que quiere ampliar el número de semanas en las que se puede abortar libremente.