Actualizado 15/07/2010 14:00

José Cavero.- Zapatero, Rajoy y la Roja.

MADRID, 15 Jul. (OTR/PRESS) -

Muchos analistas políticos daban por descontado un claro protagonismo que, con toda seguridad, tendría "La Roja" en el debate del estado de la Nación. Algún diario había anunciado que "acabada la euforia por el triunfo en Sudáfrica, el presidente aterriza en el Congreso para dar cuenta de los problemas de la España real". Alusiones claras contenía también algún análisis, como el de Miguel Ángel Aguilar: Querríamos ver a Zapatero en la senda de Del Bosque, motivando a los ministros que forman su alineación". El propio Zapatero había evocado el triunfo de "la roja" para subrayar el valor de la unidad, la fuerza unida de todos los españoles, una fuerza que ha conseguido la mejor imagen de España en el mundo.

ABC, a su vez, había anunciado que el Jefe del Ejecutivo aprovecharía el triunfo futbolístico para dejar claro que la marca España no está en horas bajas. Por su parte, ya también de antemano, el PP rebatía al PSOE, sosteniendo que la resaca del fútbol nos ha devuelto a la cruda realidad. La Vanguardia había anunciado que "Zapatero cruzará el sable con Rajoy montado en el carro de Sudáfrica", y que el mensaje del Mundial, de una España dinámica y en equipo, determina el debate. Decía el mismo cronista que, sin embargo, Zapatero no podría abusar del éxito deportivo. También en La Razón se afirmaba que "Zapatero se imbuye del espíritu de La Roja para pedir unidad". Desde el Gobierno, la vicepresidenta De la Vega había animado a "no politizar la alegría. Hay quien está preocupado porque esto sea favorable al Gobierno", dijo De la Vega.

En convergente Durán i Lleida se había mostrado tajante al rechazar que el triunfo de la selección española pudiera ser convertido en argumento para el debate, opinando que mezclar política y deporte es una fórmula nefasta. Y tampoco faltaba el símil del fútbol en las manifestaciones del portavoz del PSOE, José Antonio Alonso: "Va a ser un partido duro, bien defendido tácticamente por el jefe del gobierno y por el PSOE, y el PP va a dar patadas; Rajoy está fuera del campo, no se implica nada".

Pero quien ha ido más lejos ha sido el portavoz del PP, Esteban González Pons, al comparar al prudente y sabio Vicente del Bosque con su propio líder -de Pons- Mariano Rajoy. La comparación de Pons provocaba bromas en el Congreso. El propio portavoz socialista, Alonso, replicaba a Pons: "Rajoy es justo lo contrario a Del Bosque, porque no sabe qué hacer con la delantera y no tiene tácticas ni estrategias". Veremos cuántos oradores del Congreso logran escapar del símil futbolístico, de Del Bosque, Iker, Iniesta y compañeros triunfantes ante la camiseta naranja...

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