MADRID 25 Mar. (OTR/PRESS) -
Es verdad, los Presupuestos Generales del Estado para el próximo año no sirven para nada, están obsoletos, no responden a los problemas derivados de la crisis económica. Pero siendo esto verdad, también lo es que tampoco sirve para nada el brindis al sol hecho por el Partido Popular presentando un recurso de inconstitucionalidad contra los Presupuestos.
En mi opinión el Tribunal Constitucional no está para dirimir en las peleas políticas cotidianas, y mucho menos en esta. En realidad el PP no pretende que el Tribunal Constitucional les de la razón, su objetivo era la foto y la rueda de prensa para acaparar titulares en las primeras páginas de los periódicos y encontrar un hueco en los informativos de radio y televisión. Desde esa perspectiva se puede decir que han conseguido el objetivo, pero no el de fondo, si es que de verdad lo tuvieran.
El PP está atacando a fondo al gobierno sabiendo de su debilidad, pero debe de tener cuidado no vaya a ser que se pase en la frenada. Precisamente estos días se rumorea por la Villa y Corte que en el PP estudian la posibilidad de presentar una moción de censura contra Zapatero. Incluso le ponen fecha: después de las elecciones europeas, y a lo mejor como colofón del debate sobre el estado de la nación. Ya digo que son rumores y especulaciones del Madrid político, pero tampoco sería descabellado que el PP presentara una moción de censura.
Tal y como está concebida la moción de censura en el texto constitucional ya se sabe que es difícil ganarlas, pero pueden tener un efecto político demoledor. Felipe González presentó una moción de censura contra Adolfo Suárez y los ciudadanos pudieron visualizar que el PSOE constituia realmente una alternativa de gobierno que había líder y programa. En el caos del PP, nadie niega que tengan programa, otra cosa es la confianza que puede generar Mariano Rajoy.
En cualquier caso Rajoy espera al resultado de las elecciones europeas para mover alguna ficha importante. Y es que después del resultado en Galicia y en el País Vasco, Rajoy se siente más seguro, pero sabe que si su partido además gana las elecciones europeas, para el PSOE y Zapatero será un duro golpe.
El caso es que Rajoy y los suyos quieren aprovechar la debilidad manifiesta del gobierno Zapatero pero es evidente que actuaciones como la de presentar un recurso de inconstitucionalidad a los Presupuestos no conduce a ninguna parte.
Ya digo que es evidente que los Presupuestos del Gobierno no responden a la realidad de la situación económica, y que cada día que pasa se evidencia más la soledad parlamentaria de la familia socialista, y a esto hay que añadir las cada vez más frecuentes meteduras de pata del ejecutivo, pero aún queda partido por jugar y el PP debería de hacer un tipo de oposición que no sea algo más que hacer brindis al sol.