Pedro Calvo Hernando.- La imposible vida de los dos grandes.

MADRID 30 Sep. (OTR/PRESS) -

No tienen fácil la vida ninguno de los dos grandes partidos españoles, aunque por motivos distintos. Al PSOE y su Gobierno le pesan demasiado la crisis económica, las dificultades para hacerle frente y los vaivenes en las decisiones. Al PP ya lo aplasta la corrupción masiva, tras la publicación del nuevo informe policial que el Tribunal valenciano había desestimado irracionalmente. El Gobierno ha aprobado y presentado el proyecto de ley de Presupuestos, recibido con una especia de pitada general, pero sin que nadie aporte unas propuestas mejores, o al menos unas propuestas, asunto que terminará con pequeños pactos para conseguir los siete votos que les faltan en el Congreso. La cúpula nacional del PP comienza a caerse del guindo y presiona a los valencianos para que hagan algo de lo que se les viene exigiendo desde todos los ángulos en los últimos meses. El Gobierno no sabe aprovechar políticamente la terrible situación de su adversario y el PP no acierta a encontrar su lugar en la crisis económica ni su punto de escape de la escandalosa corrupción que lo sepulta.

Para cualquier observador imparcial y desapasionado, el panorama sería delirante y más tras las elecciones generales en Alemania y en Portugal, donde han sorteado la crisis como aquí ni soñamos. El presidente Zapatero, al menos ha sabido moverse en Nueva York y en Pittsburg, como antesala de lo que ha de ser su gestión de la presidencia rotatoria de la UE durante el primer semestre del próximo año. El líder derechista, Mariano Rajoy, por el contrario, no ha sabido moverse sino al ritmo marcado por unos acontecimientos que le desbordan o que le sobrepasan. Unas elecciones generales ahora mismo y aquí serían como una apuesta imposible. Me sorprende que dirigentes del PP pidan eso de las elecciones adelantadas, que les mandarían al infierno. Y me sorprende que el poder socialista siga tan despistado y no sea capaz de buscar al menos, si no de encontrar, una política informativa que como mínimo se corresponda con sus merecimientos. El lance de las fotos de las niñas de Zapatero es sólo un ejemplo.