Ramón Pi.- Desde la libertad.- Dos tonterías

MADRID 8 Jun. (OTR/PRESS) -

El presidente Rodríguez Zapatero no ha dejado de quejarse de la actitud hostil del Partido Popular respecto de la política gubernamental hacia la ETA. Su argumento ha sido siempre el mismo: nunca hasta ahora el principal partido de la oposición se había opuesto a la política antiterrorista del Gobierno. Hacerlo supone una grave deslealtad, ha repetido Rodríguez una y otra vez.

En sintonía con este criterio, son numerosas las voces que claman por que se excluya del debate partidista todo lo relativo al terrorismo. La última ha sido la voz del señor Erkoreka, portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados, que solicitaba lo mismo, dando por supuesto que se trata de una obviedad.

Yo debo de ser un bicho raro, porque me parecen dos tonterías. Ni lo uno me parece sensato, ni lo otro, obvio: en efecto, hay cuestiones de Estado en las que la tradición más civilizada en Occidente establece que todos los partidos hacen causa común con el Gobierno. Así, por ejemplo, y en grado eminente, eso ocurre con la política exterior, porque de esta manera todo el mundo (en el sentido de todos los Estados del planeta) sabe cuáles son los intereses permanentes de un país. O sea, justo, justito, lo que hizo Rodríguez con el caso de Irak, sin ir más lejos, o lo que hizo González con aquello tan gracioso de "OTAN, de entrada, no". En cuanto al terrorismo, eso podría valer tratándose de luchar contra el terrorismo, pero no veo por qué haya de reclamarse para negociar con los terroristas, cosa ligeramente distinta de luchar contra ellos.

Y si el planteamiento básico de los partidos políticos es tan distinto entre unos y otros como para poner de manifiesto la incompatibilidad entre la lucha antiterrorista y la negociación con los terroristas, no veo por ninguna parte que eso haya de excluirse del debate público y, desde luego, del debate electoral. Muy al contrario, me parece que si algo debe sustanciarse en la palestra pública son precisamente asuntos de tanta importancia como éste. Lo otro no tiene que ver con la democracia, sino con la mafia: tú el barrio norte, yo el barrio sur, y cada cual hace lo que le da la gana en la seguridad de que el otro no se va a entrometer.

Ramón Pi.