José Cavero.- Revuelta en el PP por el caso San Gil

MADRID 14 May. (OTR/PRESS) -

La cuestión, a estas horas del conflicto, es si María San Gil Sabía el embrollo que abría en el Partido de Rajoy con su retirada de la ponencia política del Congreso, y hasta qué punto su nombre y figura están siendo utilizados para colocar a Rajoy en su momento más débil y delicado del precongreso. María San Gil, en efecto, se ha convertido, en unas horas, en el punto de referencia de "los dos PP": Ana Botella, Acebes, Aguirre, Martínez Pujalte y muchos más se han añadido, en las últimas horas, a la presidenta del PP vasco, y por consiguiente, han pasado a resultar críticos al presidente Rajoy, por más que éste se haya esforzado, en vano, en recuperar a San Gil para la ponencia.

Eso sí, esas gestiones de Rajoy han sido privadas, y de nuevo su silencio vuelve a resultar atronador, cuando estallan sus oponentes. Algunos no dudan en asegurar que Rajoy nunca tuvo características ideales para el liderazgo y ahora menos que nunca es capaz de mantener unido al partido. María San Gil, en efecto, no solamente no regresará a la ponencia, que parece finalmente haber recogido la esencia de sus planteamientos, sino que proclama que ya no se fía de Rajoy ni de su equipo, en referencia al "negociador" o intermediario José María Lasalle, que también sale quemado de este episodio. San Gil, precisamente se sintió engañada cuando Lassalle cambió diez artículos "por problemas de lenguaje"·, y dice estar persuadida de que la dirección del PP intentará un acercamiento a las fuerzas nacionalistas.

Pero posiblemente de entre todas las reacciones favorables a María San Gil, y consiguientemente utilizadas o utilizables contra Rajoy, destaca la de Ana Botella, cuya relación sentimental y marital con Aznar es inseparable. Ana Botella ha colocado a San Gil por encima de la mayoría de los militantes: "Si ha abandonado la ponencia quiere decir que no estarán garantizados los principios del partido" -dice Botella sin detenerse a escuchar a la otra parte. Y añade que si María San Gil ha discrepado es que tiene sus razones, y que San Gil es un referente moral, político y afectivo del PP. Y con Esperanza Aguirre y Ana Botella, segunda de Gallardón en el ayuntamiento de Madrid, se han alineado Angel Acebes, Carlos Aragonés, Vicente Martínez Pujalte, Jaime Mayor Oreja, Juan Costa, Gustavo de Arístegui, Cayetana Alvarez de Toledo, Alex Vidal Quadras, Daniel Sirera... Cada cual con su propio tono más o menos ácido.

Los más "clementes", como Rita Barberá, ha señalado que "alguien estaba reclamando hace no sé cuánto tiempo, un debate de ideas". Pero todos han querido estar, en esta hora crítica, al lado de María San Gil "cuya palabra y calor ha estado siempre cerca en momentos de dificultad y desánimo", según la descripción de Ruiz Gallardón. Es decir, la figura de María San Gil, presidenta del PP vasco, y que era secretaria de Gregorio Ordóñez cuando fue asesinado, ha sido el chispazo del entendimiento del "todos contra Rajoy" que ahora mismo se puede escuchar en el seno del PP...

José Cavero.