Actualizado 12/02/2011 13:00

Mabel Redondo.- Entre Bambalinas.- El trasfondo de Carla Antonelli.

MADRID 12 Feb. (OTR/PRESS) -

Que el candidato socialista a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Tomás Gómez, haya incluido en su lista electoral a Carla Antonelli como apuesta a la diversidad ha disparado las alarmas de aquellos que siempre pecan de intolerantes, a pesar de que ellos van de todo lo contrario.

Algunas actitudes despectivas hacía la transexual obligan a pensar las barreras que pesan sobre las espaldas de algunas personas que se niegan a entender al prójimo, a comprender su lucha por sobrevivir sin parecer un "bicho raro", en definitiva su lucha por ser auténticos.

Si hay una transexual que merezca ser la primera parlamentaria, esa es Carla Antonelli, desde niño, como tantos otros, sufría en silencio la marginación por ser diferente al resto: "Sabía que no era igual a los demás niños y poco a poco logré encajarlo". Esta declaración forma parte de una extensa entrevista que le hice a Carla y que publiqué en la revista "Sexologies" recientemente. Gracias a su incesante lucha consiguió ser la primera persona que cambió su nombre y su sexo en el DNI, fue un logro que obtuvo a base de tenacidad y constante reivindicación de sus derechos: "Me han dado palizas, me han detenido y metido a la fuerza en lecheras y he estado en la cárcel, pero no pienso flagelarme por ello. Si no hubiera sido por eso, hoy no sería la Carla que soy".

Carla nació niño, siendo un adolescente y hasta los 19 años se sometió a tratamientos endocrinológicos y hormonales que la ayudaron a ser lo que es en la actualidad: una mujer transexual. Durante 33 años no se atrevió a pisar su pueblo natal, Güímar (Tenerife), quería evitar el repudio de sus vecinos y no volvió allí hasta que no consiguió transformar su género. Ahora en Gúímar la adoran, la han premiado y ha sido pregonera de las fiestas, sus paisanos la quieren tal y como es.

Durante años Antonelli ha sido una activista política que ha luchado por sacar adelante la "Ley de Transexuales", ha militado a conciencia y aunque se retiró oficialmente en 2007 su voz siempre ha sonado en los medios con el mismo mensaje de solidaridad con los gays, lesbianas y transexuales. Durante todo este tiempo ha alternado conferencias en las que contaba su experiencia con algunos trabajos en teatro y televisión.

Este verano coincidí con Carla en una cena que celebraba una amiga común, la encontré muy relajada, tranquila, pero como siempre con ganas de hacer mil cosas, todo por la causa. Carla ha vuelto a la carga y lo mejor es cuando recuerda que a pesar de la eterna discriminación: "Siempre encuentras a gente que te contempla, te descubre y te quiere tal y como eres". No lo dudes, Carla.

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