Análisis: 'Fairytales Fights', cómo ha cambiado el cuento

Fairytale Fighst
Playlogic
Actualizado: martes, 17 noviembre 2009 20:16

MADRID, 17 Nov. (Carlos Hergueta/EP) -

Érase una vez una niña que siempre iba vestida con una capucha con capa de color encarnado muy vivo. Una prenda que la hizo famosa en la región por el nombre de Caperucita Roja. La joven tenía una mirada dulce, una sonrisa angelical y... un hacha con la que descuartizaba a sus enemigos y llenaba el bosque de sangre. Junto a ella, Blancanieves, el Emperador desnudo y Jack -el de las habichuelas mágicas- reinventan los cuentos de hadas en 'Fairytale fights', un 'beat'em up' de la vieja escuela.

Lo mejor:

- El diseño de personajes y el argumento son delirantes.

- La violencia extrema combinada con cuentos de toda la vida.

Lo peor:

- Desarrollo repetitivo, aunque mejora junto a varios amigos.

- Técnicamente sencillo; desaprovecha el Unreal Engine.

El 'beat'em up' de corte clásico está en desuso. Nacido en los salones recreativos de los 80, es un género que no ha envejecido bien y que denota falta de situaciones complejas y variadas que inviten a algo más que una rápida partida o al juego en compañía. Por eso el género tendió hacia el 'hack'n slash' representado por 'God of War' o 'Ninja Gaiden'. Sin embargo, cierto es que los fans del género están ahí y que reclaman apuestas centradas únicamente en el combate callejero.

Porque en eso consiste 'Fairytale Fights': una sucesión de combates por escenarios en 3D, con una cámara lateral aérea estática que va acompañando a la acción; de uno a cuatro jugadores. La clave del juego es el humor, desde el diseño de personajes, pasando por la violencia extrema, hasta el curioso argumento.

El resultado llega gracias a una atípica mezcla de personajes de conocidos cuentos con una violencia extrema del estilo de la serie 'Happy Tree Friends'. Los personajes Caperucita Roja, Jack y su habichuela, el Emperador Desnudo y Blancanieves han visto cómo alguien les roba el protagonismo en sus respectivos cuentos y deciden recuperarlo por las bravas. Esto no es otra cosa que armarse con todo tipo de objetos y salir a pasear por diferentes escenarios de cuento para segar vidas.

De esta forma, encontramos 22 escenarios inspirados en los cuatro cuentos. En ellos y al mando de los diferentes personajes hemos de ir acabando con decenas de enemigos -el desarrollo habitual- y de vez en cuando pulsar algún interruptor y superar zonas de plataformas.

PEGA, PEGA Y VUELVE A PEGAR.

Movemos al personaje con el stick izquierdo y atacamos inclinando el stick derecho en diferentes direcciones, lo que desencadena distintos ataques. La opción elegida resulta algo incómoda, ya que mover el stick para realizar movimientos analógicos -esto es, una pulsación, un ataque- resulta poco intuitivo. No entendemos por qué se ha elegido en lugar de los cuatro botones del pad. Por su parte, los gatillos y botones superiores permiten acciones como coger/arrojar armas o cubrirnos.

Los combates no exigen de demasiada planificación y simplemente hemos de coordinar bien nuestro ataque con, de cuando en cuando, la protección. Sí podemos introducir alguna variante como mantener pulsado un botón de ataque para desencadenar un golpe más fuerte. Además, si llenamos una barra podemos realizar un ataque especial con el que descuartizar a placer a los enemigos. Además, contamos con tres tipos de armas: contundentes -golpean-, blancas -cortan- y de fuego -disparan proyectiles-.

La pulsación de interruptores no representa ningún problema y se limita a pulsar un botón del mando en determinado momento. Por su parte, las escasas zonas de saltos suelen recurrir a evitar peligros -ruedas dentadas, pinchos, etc- y rompen un poco la monotonía pero la cámara puede jugarnos más de una mala pasada.

Con los combates como piedra angular, el resto de elementos no hacen más que romper de vez en cuando la monotonía, que lamentablemente abunda. El desarrollo no tarda en volverse repetitivo, aunque sí que es cierto que al cabo de un tiempo de descanso, el cuerpo nos vuelve a pedir volver a coger 'Fairytales' para proseguir la matanza. Además, junto con otros tres amigos en la misma consola o a través de Xbox Live la experiencia se vuelve mucho mucho más entretenida.

Por otro lado, durante el desarrollo del juego vamos recogiendo piedras preciosas y monedas que podemos gastar para conseguir pequeños extras como una estatua de nuestro héroe en mitad de la plaza del pueblo.

ABUELITA, ¡QUÉ SANGRE TAN ROJA TIENES!

El diseño de los personajes de cuento que se baten el cobre en 'Fairytale Fights' recuerda a la película 'La verdadera historia de caperucita roja' combinada con las formas angulosas de 'Banjo & Kazooie: Baches y cachivaches'. Formas rectas y curvas y diseños desenfadados se combinan para completar un diseño global lleno de personalidad. Otro de sus puntos a favor es la sangre, que fluye de forma dinámica empapando los escenarios y se ve afectada por el movimiento del personaje en pantalla, que también se mancha y patina por el suelo cuando pisa este líquido elemento.

El resultado de esta combinación de elementos es un aspecto limpio, simpático y desenfadado pero poco detallado de forma general. En definitiva podemos decir que Playlogic no ha hecho un uso demasiado bueno del Unreal Engine, el potente motor que ha hecho correr obras maestras como 'Bioshock'. Y es que a parte de no estar ante un título puntero en cuanto a cantidad de polígonos o texturas, de vez en cuando encontramos ralentizaciones. El audio se correcto simplemente. El título carece de voces y deja toda la expresividad sonora a los efectos sonoros, que sí son más variados.

CONCLUSIÓN:

El desarrollo de 'Fairytale Fights' es sencillo como lo era el de los 'beat'em up' que reinaban en los salones recreativos hace 20 años. Un concepto que hoy casi parece relegado a los servicios de descarga de las consolas más que para la compra en disco. Resulta entretenido en pequeñas dosis y muy divertido en compañía -lo cual puede ser siempre gracias al juego on-line-. Recomendable para los amigos del "pega-pega-pega y vuelve a pegar". El resto se conformará con un alquiler.

Gráficos: Coloristas y sangrientos a la vez. Un estilo propio con un buen diseño pero con un Unreal Engine muy mal aprovechado. 6,8.

Sonido: Las melodías, animadas y de fantasía le van muy bien. La apuesta por los efectos en lugar de las voces queda bien al principio pero llega a cansar. 6,6.

Diversión: Aquellos que echen partidas cortas y en compañía disfrutarán de buenos ratos de diversión. Pero las prolongadas en solitario llegan a cansar. 6,5.

Total: Una apuesta algo alejada de los tiempos que corren, demasiado ceñida únicamente a los golpes y donde se echa de menos más variedad. 6,6.

'Fairytale Fights' ya está a la venta para Xbox 360 y Playstation 3 con un PEGI para mayores de 16 años.