MADRID, 11 Sep. (Portalgeek) -
La compáñía californiana Alternative Ballistics ha creado un sistema capaz de convertir una bala normal en munición no letal para evitar muertes indeseadas cuando se producen disparos.
En la películas no es extraño
que un policía dispare contra una pierna o contra un arma que le apunte
directamente para reducir a un criminal sin causarle daños graves, pero lo
cierto es que los agentes reales están entrenados para disparar al centro de
masa del blanco incluso cuando solo tienen intención de derribarlo.
La propuesta de Alternative
Ballistics para reducir las muertes por intervención policial consiste en un
soporte de plástico llamado 'The Alternative' que se ajusta al cañón
de una pistola semiautomática y se instala en pocos segundos con
ayuda de
una
sola mano. El soporte
integra una esfera hueca que, en el momento de efectuar el disparo, se fusiona con la bala para
reducir su velocidad hasta en un 80 por ciento y provocar
el mismo impacto que un proyectil de goma, de forma que alcance el objetivo sin penetrar o causar daño letal.
Tras el disparo, el soporte
de plástico se retira de la pistola de forma automática, con lo que el agente de
policía puede volver a abrir fuego acto seguido, bien sea
instalando otro soporte desde la cartuchera de su cinturón, o efectuando un
disparo letal. La compañía Alternative Ballistics está inmersa en entrenar a los
policías en el uso del invento y en concienciar de sus bondades a través de un
curso de instructor de dos días.
No obstante, al igual que ocurre
con cualquier munición no letal, si estas balas alcanzan una zona delicada
(véase un ojo) pueden
reventarla sin problemas, si bien no causarán la muerte
del objetivo en ningún caso.