Afectados por preferentes ocupan una oficina de Novagalicia

Oficina Con El Logo De Novagalicia Banco
EUROPA PRESS
Actualizado: lunes, 28 mayo 2012 19:46

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 28 May. (EUROPA PRESS) -

Un grupo de afectados por las participaciones preferentes ha ocupado esta mañana una de las oficinas de Novagalicia Banco en la localidad pontevedresa de Moaña. Las tres sucursales que el banco tiene en el municipio reabrieron este lunes, tras doce días cerradas.

La entidad decidió el pasado 16 de mayo cerrar "temporalmente" sus tres oficinas en el municipio pontevedrés "ante la imposibilidad de garantizar la prestación del servicio en las debidas condiciones y para preservar la seguridad de clientes y empleados", debido a las protestas de los afectados por las preferentes.

Esta mañana han vuelto a su actividad habitual las tres oficinas y un grupo de afectados ha entrado en la sucursal de Concepción Arenal, en donde no se han producido altercados y los clientes están siendo atendidos, aunque a un ritmo más lento, dada la presencia de este grupo de personas.

El banco anunció este fin de semana que reabriría las sucursales, puesto que tenía "el compromiso de representantes de la plataforma de afectados por las preferentes de respetar el normal funcionamiento de las oficinas, para garantizar el servicio a los clientes y el respeto a los empleados".

El alcalde y los principales agentes sociales de Moaña, indicó en una nota, "han auspiciado e intermediado en el proceso, en el interés de que las oficinas pudiesen reabrir cuanto antes, una vez alcanzados compromisos necesarios con las Fuerzas de Orden Público".

Así, el banco ha solicitado la convocatoria de la Junta Local de Seguridad "para abordar el asunto y establecer las pautas que garanticen la seguridad de clientes y empleados".

"Novagalicia se verá obligada cerrar oficinas en cualquier población en la que no se respete el normal funcionamiento de la actividad, el libre acceso de clientes o el trabajo de sus empleados sin intimidaciones", subraya.

Pese a ello, reconoce "el derecho de los afectados a expresarse y manifestarse", pero "dentro de los cauces constitucionales" y asegura comprender "perfectamente el malestar y la incertidumbre de los clientes en posesión de participaciones preferentes u obligaciones subordinadas perpetuas".

En este sentido, se compromete con los afectados "a mantener abiertas todas las vías de diálogo e información sobre las gestiones que el banco realiza para lograr una solución al problema".