Una veintena de comercios del Raval de Barcelona no puede abrir por los destrozos sufridos tras el 'botellón'

BARCELONA, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -

Una veintena de comercios del Raval de Barcelona no han podido hoy abrir sus puertas a causa de los destrozos sufridos durante la madrugada del sábado, cuando después de la convocatoria del 'botellón' decenas de grupos de jóvenes provocaron altercados y saquearon algunos establecimientos.

Los propietarios de las tiendas más dañadas calculan que "no podrán volver a dar servicio a sus clientes durante dos o tres días", aseguró hoy a Europa Press el presidente de la Federación de Comerciantes Eje del Raval, Enric Sánchez, que hoy se entrevistó con los dueños de algunos establecimientos.

El establecimiento de congelados 'La Sirena', situada en la esquina de las calles Maria Aurèlia Capmany y del Carme, es una de las tiendas que han sufrido más daños, ya que durante la madrugada del sábado, los alborotadores rompieron cristales, destrozaron parte del mobiliario interior y se llevaron carros y género.

La encargada de este comercio, Noemí Torres, ya advirtió a primera hora del sábado, tras comprobar los destrozos de la tienda, que ni hoy ni mañana podrían abrir el establecimiento, ya que los saqueadores se habían llevado helados, pescados y lo habían destrozado todo.

Sánchez destacó que otros de los comercios más perjudicados son un local del Institut d'Estudis Catalans (IEC), adyacente a la sede de este organismo, situado en la calle del Carme, que tenía una silla incrustada en el escaparate y libros y documentos esparcidos en su interior.

MÁS DE UN MILLÓN DE EUROS EN DAÑOS.

Los destrozos también afectaron una entidad de 'La Caixa', en la calle Joaquim Costa, y la fachada de la mítica taberna modernista Casa Almirall, que data de 1860. "La persiana del establecimiento está quemada y el rótulo del cristal está medio roto", explicó Sánchez.

El presidente de los comerciantes del Raval calcula que más de 40 comercios del Raval han sufrido daños de menor o mayor cuantía y que el valor de todos los destrozos y del mobiliario urbano asciende a "más de un millón de euros", por encima "de los 600.000 euros que ha calculado el Ayuntamiento de Barcelona".

PIDEN AYUDAS PARA REPARAR LOS DESTROZOS.

Ante esta situación, Sánchez aseguró que desde la agrupación de comerciantes "intentaremos pedir ayudas a la Generalitat y al Ayuntamiento para reparar todos los desperfectos". "Esto nunca había ocurrido en el Raval, con tanta contundencia", señaló.

No obstante, el representante de esta federación de comerciantes desvinculó los altercados del sábado con la convocatoria del 'botellón', ya que "éste se organizó sin problemas y con un control policial total".

Según Sánchez, los problemas vinieron después, "cuando grupos de incontrolados se aprovecharon de la situación y empezaron a saquear y a destrozar los comercios de la zona".