Unas 20.000 tortugas marinas se capturan accidentalmente cada año en el Mediterráneo por la flota palangrera española

Actualizado: miércoles, 26 abril 2006 17:18

El 30 por ciento de las tortugas capturadas mueren al ser liberadas según un informe elaborado por la ONG Oceana

VALENCIA, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -

Cerca de 20.000 tortugas marinas se capturan accidentalmente cada año en el mar Mediterráneo, mediante el arte de pesca llamado palangre de superficie, según afirmó hoy el director de Oceana para Europa en la sede del 'Desafío Español' con motivo de la presentación de los resultados del informe que ésta organización no gubernamental (ONG) ha realizado sobre las capturas accidentales de tortugas marinas por la flota palangrera española, bajo el nombre "Amenazas y soluciones para la supervivencia de las tortugas marinas en el Mediterráneo".

De ellas, que han llegado a superar los 30.000 ejemplares en determinados años, "un 30 por ciento mueren al ser liberadas por los pescadores, que no quieren capturarlas, por la gravedad de la herida que les causa el anzuelo", añadió Pastor.

El estudio, financiado por Obra Social Caja Madrid, "recoge unas primeras conclusiones sobre cómo reducir las capturas accidentales de tortugas marinas con el palangre", arte de pesca principalmente destinado a la captura del pez-espada que también afecta a la captura de la tortuga marina, apuntó. En su opinión, "el palangre puede modificarse, beneficiándonos a todos, al modificar la profundidad a la que cala el anzuelo, al cambiar la forma del mismo, así como al variar la hora de captura y el cebo utilizado".

En éste sentido, Pastor recomendó que la profundidad de captura descienda a unos 35-40 metros, "dónde no se encuentran tantas tortugas marinas y los peces-espada son de mayor tamaño, lo que soluciona un doble problema". Así, propuso que la forma del anzuelo sea la de forma de 'G', más redondeada que la utilizada habitualmente. Así como que el palangre se retire durante la noche y no a primera hora de la mañana, "cuando se alimentan las tortugas marinas". El uso de cebo de pescado, en vez de calamar, por ejemplo, es otra de las medidas planteadas en el informe.

Pastor señaló que "se plantee la posibilidad de vedar pesca en determinadas zonas de mayor concentración de ejemplares", como la comprendida entre las Islas Baleares y el Mar de Alborán, y que las pérdidas ocasionadas a los pescadores se "compensen" con subsidios de las administraciones públicas. "Estas subvenciones encajarían con la motivación de las ayudas de la UE", aseguró.

El estudio se realizó durante seis meses de 2005 gracias al acuerdo firmado con la Secretaría General de Pesca Marítima del Ministerio de Agricultura y la colaboración del Instituto Español de Oceanografía, que realiza un trabajo sobre pesca experimental. "Las conclusiones de este trabajo", anunció, "junto al informe elaborado por Oceana, permitirán determinar la cantidad de tortugas que se pueden salvar con la aplicación de estas medidas".

"URBANIZACIÓN DE PLAYAS Y VERTIDO DE RESIDUOS

La presentación del informe también contó con la presencia del Director de Negocio de Levante y Subdirector General de Caja Madrid, Bienvenido Saún, así como del Director Gerente de Obra Social Caja Madrid, Carlos Martínez, quién incidió en que la contaminación provoca también el fallecimiento de numerosos ejemplares. "Las tortugas ingieren plásticos al confundirlos con medusas", un problema que se añade a la "urbanización" de las playas o al vertido de residuos químicos. "Las tortugas han sobrevivido a lo largo de miles de años, pero ahora han topado con su mayor obstáculo: el hombre", sostuvo Martínez.

El Director del Centro Oceanográfico de Murcia del IEO, Julio Mas, explicó, por su parte, que el último ejemplar encontrado de tortuga boba en España fue en el Cabo de Gata hace tres años, aunque "la costa española no es un lugar de puesta de tortuga por las mismas condiciones de la playa y por las propias características de la especie".