Las hectáreas arrasadas en Andalucía por las barbacoas superan en nueve veces a la superficie arrasada por quema de residuos agrícolas
SEVILLA, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
La organización agraria Asaja Sevilla exigió hoy a la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, la retirada del anuncio televisivo de concienciación sobre los incendios y que hace alusión a la quema de rastrojos por parte de los agricultores, un aspecto que, según esta organización "criminaliza" a los productores agrícolas.
En un comunicado remitido a Europa Press, Asaja sostuvo que la quema de rastrojos o residuos agrícolas "dejó de ser la primera causa de incendios forestales en España", según el informe 'Los Incendios Forestales en Andalucía' presentado en octubre de 2005, con lo que, a su juicio, el anuncio, que muestra a un agricultor enciendo un fuego para la quema, produce un "agravio" contra este colectivo.
Del mismo modo, Asaja-Sevilla hizo una llamada de atención a los medios de comunicación, ya que, con "bastante ligereza, ofrecen titulares en los que se apunta al sector agrario como responsable de los incendios forestales", mientras que "son precisamente los agricultores y ganaderos los más perjudicados por los incendios forestales y los agentes más activos en la lucha contra el fuego".
Según el informe 'Los Incendios Forestales en Andalucía' al que hizo alusión Asaja en su comunicado y que fue presentado por la Consejería de Medio Ambiente, en 2005 las negligencias fueron la causa de la pérdida de 4.048,2 hectáreas, el 34,8 por ciento de todas las que se quemaron en Andalucía ese año, de las cuales los agricultores fueron responsables de la pérdida del 1,8 por ciento, con 188 hectáreas quemadas y, de ellas, 29 de terreno arbolado.
Así, el informe refleja que las imprudencias cometidas en las hogueras para barbacoas o fines similares calcinaron el 15,5 por ciento de toda la superficie quemada en Andalucía, por esta causa se quemaron 1.798,9 hectáreas, supera en nueve veces al número de incendios provocados por la quema de residuos agrícolas, según explicó.
Además, la asociación agregó que por encima de la quema de rastrojos o residuos agrícolas se sitúan también los incendios causados como consecuencia de negligencias en vertederos de residuos sólidos urbanos, que provocaron la quema de 466,1 hectáreas, lo que equivale al cuatro por ciento de toda la superficie calcinada, y el deficiente mantenimiento de las líneas eléctricas y de ferrocarril, que provocaron la quema de 612,5 hectáreas, lo que equivale al 5,5 por ciento de la superficie calcinada.
LOS MAS RAPIDOS EN CONTROLAR
Los agricultores también señalaron que los fuegos ocasionados por la quema de residuos agrícolas fueron los que más rápidamente se controlaron, "bien por la intervención de los propios agricultores, bien por su previsión", esto es, existencia de cortafuegos, puntos de agua y maquinaria adecuada en lugares próximos al del incendio.
