La gestión del lobo en Castilla y León podría servir como ejemplo para otras zonas de la Unión Europea

Actualizado: viernes, 21 abril 2006 15:43

La Junta invertirá 4 millones de euros en la gestión del plan a lo largo de unos 10 años

VALLADOLID, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -

La gestión del lobo en Castilla y León podría servir de ejemplo para otras zonas de la Unión Europea en los casos en los que se aceptara una cierta flexibilidad en la aplicación de la directiva de conservación de los hábitats naturales.

Así lo pusieron de manifiesto hoy el jefe de la Unidad de Biodiversidad de la DG-11 de la Comisión Europea, Nicholas Hanley, y el consejero de Medio Ambiente, Carlos Fernández Carriedo, durante una reunión de trabajo celebrada en Valladolid en la que estuvieron presentes también representantes de comunidades limítrofes, regiones fronterizas portuguesas y del Ministerio de Medio Ambiente.

Este encuentro cierra el proceso de consultas y participación para la elaboración del Plan de Gestión del Lobo de Castilla y León, para cuya gestión la Junta aportará 4 millones de euros en un plazo aproximado de unos 10 años.

En declaraciones a los medios recogidas por Europa Press, Hanley explicó que hay un interés por trabajar con Castilla y León para lograr un Plan de Gestión que proporcione un marco lógico basado en la buena comprensión científica de la especie del lobo pero también una conexión con los intereses sociales y económicos.

Esta situación se debe a que la normativa europea contempla al lobo en la mayoría de las comunidades como una especie protegida pero reconoce también que habrá situaciones en las que será necesario controlar la especie cuando se den situaciones de conflicto con los agricultores o la seguridad pública.

Por ello, cree que la colaboración con Castilla y León y este Plan permitirían proporcionar un marco en el que la región podría solicitar las derogaciones que la Directiva permite para sobrepasar los conflictos, ya que la Directiva 92/43/CEE de conservación de los hábitats naturales y de la flora y fauna silvestre, considera protegida la población de lobo situada al sur del río Duero y cinegética al norte del mismo, lo que ha dificultado la gestión.

Así, se podrían flexibilizar algunos criterios en función de un adecuado Plan de Gestión de la especie, en lo que Hanley considera que "se ve el trabajo iniciado por Castilla y León como una base muy sólida" y se espera que en los próximos debates haya una comprensión mutua para lograr el equilibrio entre la conservación de la especie en peligro en Europa y las preocupaciones legítimas de los ganaderos y otras comunidades que pudieran resultar afectadas.

De la misma forma, el responsable de la Unión Europea destacó que Castilla y León es la primera región que está trabajando intensamente y se espera un acuerdo que sea modelo y recomendación para otras zonas de la Unión Europea que se están enfrentando de forma similar al problema para lograr la compatibilidad entre el lobo y el ser humano.

EXCELENCIA DEL PLAN.

Por su parte, Carlos Fernández Carriedo indicó que el objetivo de esta reunión, además de ver el posible ejemplo de la gestión en la Comunidad, también es tratar de conseguir que el Plan de Conservación y Gestión de Castilla y León alcance el "máximo nivel de excelencia", para lo que se trata de garantizar la coherencia con la gestión de las comunidades limítrofes.

El consejero de Medio Ambiente recordó que en Castilla y León vive la mayor población de lobo de toda la Península y una de las más importantes de toda la Europa Continental y, tras un proceso de regresión, a partir de finales de los años setenta se ha ido recuperando la especie hasta alcanzar una población superior a los 1.500 ejemplares en más de 100 familias en todas las provincias de la Comunidad.

Carriedo considera que el control de la especie en determinadas áreas, incluso con su aprovechamiento cinegético, demuestra de forma evidente que permite disminuir conflictos, aumentar la población del lobo o de determinadas especies que pudieran verse afectadas por la desaparición de éste.

Por ello, con el Plan de Gestión y Control, al que se destinarán 4 millones de euros, se pretende asegurar la conservación del lobo a largo plazo, disminuir la actitud hostil y prevenir la venganza contra estos animales, que pude provocar daños indirectos a especies en riesgo de extinción, entre otras cuestiones.

Como medidas de gestión, la Junta, en relación con la ganadería lleva a cabo algunas iniciativas preventivas como el suministro de perros guardianes, mastines, para los ganaderos, a los que se proporciona además una ayuda de 130 euros durante los dos primeros años de vida del animal, considerado su periodo de aprendizaje. En este contexto, en el año 2005 se han entregado 50 animales.

Asimismo, se están instalando vallados protectores en las provincias de Ávila y Salamanca, donde ya se han dispuesto 12 cierres, tanto electrónicos como convencionales.

Por otro lado, como iniciativas compensatorias, se propone el mantenimiento del sistema de compensación de franquicias de seguros, mejorando algunas cuestiones como el periodo de aviso (reduciéndose de 96 a 48 horas), disminuyendo la documentación a aportar y estableciendo la posibilidad de dirigirse al 112 para avisar de todo ataque. Además, se pretende mantener la asistencia técnica de los ganaderos al sur del Duero mediante un teléfono permanente de contacto.

En el caso de la especie se proponen medidas como la caza deportiva y control, la minimización de causas de mortandad, el conocimiento de la especie, actividades de información, educación y sensibilización, entre otras.