Los Verdes cree que el Estrecho "es una bomba de relojería" y demanda medidas para evitar situaciones de riesgo

Actualizado: lunes, 29 enero 2007 14:44

MADRID, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -

El portavoz de Los Verdes de Andalucía y diputado nacional, Francisco Garrido, aseguró hoy con respecto al encallamiento del buque frigorífico 'Sierra Nava' en la Punta San García, junto al puerto de Algeciras, que la zona del Estrecho de Gibraltar es "una bomba de relojería desde el punto de vista de los accidentes y de lo que podría ocurrir".

En declaraciones a Europa Press, Garrido reiteró que su partido demanda medidas para evitar las situaciones de riesgo actuales, que pasarían por "reforzar el control, prohibir 'bunkering' --trasvase de petróleo de un barco a otro en alta mar--, controlar el tráfico por el Estrecho y exigir que se navegue a una distancia determinada y que el atraque sea solo en puerto".

El diputado ecologista señaló, además, que el Ministerio de Fomento tiene una actitud "consistente en permitir el máximo de tráfico posible en casi cualquier condición, con poca vigilancia" lo que, a su juicio, "favorece que se puedan producir situaciones de este tipo u otras peores".

En este sentido, Garrido cree que "de nuevo se está olvidando la catástrofe del Prestige y las medidas que se pusieron en marcha después" ya que, si en esta ocasión ha sido un buque frigorífico, y el combustible vertido únicamente era parte del que tenía para su consumo, "podría haber sido un petrolero, uno cargado con sustancias peligrosas o alguno de los que hacen trasvase de petróleo en la misma bahía".

CATÁSTROFES NO ACCIDENTALES

En la misma línea, el diputado señaló que las consecuencias del encallamiento del 'Sierra Nava' en Algeciras y su posterior vertido son "catástrofes no accidentales" sino que el tipo de tráfico y de atraque que se permite en la Bahía y en el Estrecho "posibilita que esto ocurra". "Desgraciadamente ha ocurrido pero podría haber sido mucho más grave si se tratase de un petrolero", añadió.

Con respecto a las consecuencias del vertido, Garrido señaló que el impacto medioambiental afecta a cuatro kilómetros de costa que ahora hay que descontaminar pero podría haber tenido un "impacto turístico si se hubiese producido en mayo o junio" ya que "el daño sobre la imagen y el turismo sería mucho mayor".

Por último, el diputado apuntó a la posibilidad de que existiese un delito ecológico si se demostrase que una negligencia por parte de la compañía naviera o un incumplimiento de alguna normativa, "lo malo es que no hay medidas de seguridad que garanticen que no se pueda atracar en esa zona", concluyó.