MADRID 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
Unas 10.000 personas siguen hoy on-line la segunda jornada del Congreso Católicos y Vida Pública, que, organizado por la Fundación Universitaria San Pablo-CEU, celebra este año su octava edición bajo el título 'El desafío de ser hombre', según indicó a Europa Press el director del Departamento de Historia y Pensamiento de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Comunicación del CEU, José Luis Orella.
El responsable de la recepción de preguntas a través de la web del congreso (http://www.ceu.es/congreso) explicó que este viernes, primera jornada del mismo, entraron a través de la misma una veintena de preguntas de España, Argentina, Chile, Méjico, Italia y Colombia, referidas, fundamentalmente, al "compromiso público de los católicos y la incoherencia de políticos" en determinadas cuestiones de actualidad que les afectan.
Asimismo, José Luis Orella añadió, que entre los temas más habituales se hallan también el "compromiso con la defensa de la vida y el compromiso de los medios de comunicación".
Además de la asistencia virtual, unas 1.200 personas asisten físicamente al congreso (sede del CEU de la madrileña calle de Julián Romea), según indicaron a Europa Press fuentes de la organización.
La asistencia física está en línea con años anteriores, mientras que los seguidores on-line han aumentado de los 9.024 del pasado año a los 10.000 registrados ya en esta octava edición, a falta de la jornada de mañana. No en vano, para los seguidores del congreso vía Internet, la organización ha aumentado el ancho de banda de emisión a 128 Kb, de modo que se podrá conseguir una imagen más nítida y de mayor calidad.
A través de la web del evento se puede acceder a las conferencias y a las mesas redondas desde cualquier parte del mundo y se puede participar, además, de forma activa planteando preguntas a los ponentes.
El Congreso Católicos y Vida Pública, organizado por la Fundación Universitaria San Pablo-CEU, se celebra desde 1999 con el objetivo de ser un foro de encuentro que busca promover la participación de los católicos en la vida pública, evitando la ruptura entre las esferas pública y privada.