MADRID, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un total de 11.826 personas han sido trasladadas este año de Canarias a la Península, de las cuales, el 75 por ciento han sido acogidas por organizaciones no gubernamentales (ONG): 2.742 por Cruz Roja, 2.755 por la Asociación Comisión Católica Española de Migraciones, 2.148 por la Comisión Española de Ayuda al Refugiado, 1.241 por el Consorcio de Entidades para la Acción Integral con Inmigrantes y 699 personas por Movimiento por la Paz, el Desarme y la Libertad. Las comunidades autónomas sólo se hicieron cargo de 2.189 (20 por ciento).
Desde las comunidades autónomas, destacan la disposición de plazas para acogida de inmigrantes de la Comunidad Valenciana, que ofertó al Gobierno un total de 444; seguida de Aragón, con 280; Extremadura, con 263; Cataluña, con 263; Andalucía, con 261; Asturias, con 213, y Castilla-La Mancha, con 163, según destacó el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, tras visitar un centro para mayores de Cruz Roja en Madrid. Además, agregó que la Comunidad de Madrid, donde ha habido "críticas injustas", sólo ofertó 120 plazas de acogida de irregulares.
"La parte más importante de acogida la desarrollan las ONG, a las que el Gobierno ayuda económicamente", valoró Caldera, resaltando que el Ejecutivo ha multiplicado por dos en un par de años la partida (más de 12 millones de euros) para estas organizaciones.
Tras asegurar que se cumple "estrictamente y rigurosamente" el protocolo de traslado de inmigrantes de Canarias a la Península, respetando sus derechos y avisando a las comunidades autónomas, el titular de Trabajo y Asuntos Sociales reconoció que "en una sola ocasión y para 50 personas hubo un fallo de comunicación, como ha reconocido el Gobierno, recientemente en Barcelona". En todo caso, recordó que se ha convocado de nuevo la Comisión Mixta de Traslados para discutir allí cualquier problema y mejorar, "pidiendo la solidaridad de todos".
En relación al traslado de menores, Caldera señaló que es una competencia de las comunidades autónomas, que el Gobierno, pero mostrando su preocupación por el problema "grave" que vive Canarias en estos momentos: "que está desbordada". Por ello, el Ejecutivo ha ofrecido "toda su cooperación" y ha convocado el Consejo Superior de la Inmigración para desarrollar una estrategia de reparto o ubicación solidaria de estos menores en la Península. "Vamos a tratarlo allí y el Gobierno hará todo lo posible por ayudar a Canarias, siempre pensando en el interés del menor", aseguró.
Sobre las críticas vertidas por su ausencia por vacaciones mientras se registraba una avalancha de ilegales en Canarias, el ministro dijo que durante los quince días que estuvo de vacaciones le sustituyó la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí, que "estuvo íntegramente a diario atendiendo esta situación", mientras que el resto del tiempo se encargó él. No obstante, considera que los más de 18.000 llegados a España este año por el momento es una cifra similar a 2003, cuando gobernaba el PP y año en el que accedieron a las costas españolas unos 19.000 inmigrantes ilegales.
Sobre la petición de Médicos del Mundo a los diferentes gobiernos para atender a unos 50 inmigrantes que están en tierra de nadie entre Mauritania y Marruecos, Caldera aseguró que el Gobierno español, como siempre, cooperará en cualquier causa humanitaria, y esta lo es. Aunque específicamente esta tarea le compete al Ministerio de Asuntos Exteriores, sin ninguna duda defendemos un trato humanitario para todas las personas, programas de traslados de estas personas en condiciones humanitarias y, por supuesto, sus derechos, que son lo principal. "Haremos cuantas gestiones estén en nuestras manos para que estas personas no queden abandonadas a su suerte".
INMIGRACIÓN, FENÓMENO "POSITIVO" POR APORTAR RIQUEZA
Además, Caldera cree que hay que ver la inmigración como un fenómeno "positivo" para España, que tiene que abordarse desde el respeto a los derechos de las personas y el reconocimiento a su "importante" aportación a la economía española: mejora el empleo, crece el PIB crezca y aumenta la renta per cápita.
Por ello, el Gobierno ha desplegado una "ofensiva diplomática enorme" para implicar a la Unión Europea, no sólo económicamente, sino políticamente. "Que Europa se tome este fenómeno como prioritario para salvar vidas humanas y evitar los efectos negativos de la inmigración ilegal", afirmó, asegurando que Europa "sí se ha implicado" en esta cuestión porque, a pesar de que la Comisión Europea dice que este año no puede librar más recursos económicos, que el año que viene sí están previstos, sí que va a trabajar por un compromiso institucional y político para conseguir establecer convenios y programas de repatriación humanitaria.
"Hemos desempeñado una ofensiva diplomática de medidas de seguridad, ayuda económica al Plan África con países subsaharianos y más al Norte para evitar este fenómeno", resumió, mostrándose convencido de que se conseguirán reducir los flujos migratorios pero subrayando que es una tarea "larga, compleja, difícil". Así, no considera un fenómeno significativo el paso de irregulares desde Argelia pero si se comprobara "por supuesto" se intensificarán las gestiones diplomáticas con este país.
En su visita al 'Centro de Mayores Reina Sofía' de Cruz Roja, el ministro de Trabajo valoró la "fortísima" implicación de esta ONG en el tratamiento de personas en riesgo de exclusión y atención a inmigrantes a pie de playa y en su acogida, así como su trabajo en beneficio de las políticas sociales. "Es una organización ejemplar", manifestó Caldera, agradeciendo su "noble" tarea y asegurando que el Ejecutivos seguirá poniendo a su disposición "todos los medios necesarios".
