La cifra de jóvenes de 15 a 29 años que no estudia ni trabaja fue del 21,1% en 2011, frente al 15,4% de la media europea
MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
El nivel de formación en estudios superiores entre la población de entre 25 y 64 años se ha incrementado en 8,9 puntos en la última década, al pasar del 22,7% en el año 2000 al 31,6% en 2011, según la explotación estadística de la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE) y la Encuesta Comunitaria de Fuerza de Trabajo (Labour Force Survey-LFS) de Eurostat, dadas a conocer por el ministerio de Educación.
En el caso de los estudios primarios, es decir, inferiores a la primera etapa de Educación Secundaria, la brecha se ha reducido cerca de 20 puntos, al pasar del 37,2% del año 2000 al 17,9% de 2011, entre el mismo segmento de población. En el caso de los estudios en primera etapa de Educación Secundaria se ha pasado del 24,4% en 2000 al 28,3% el año pasado; cifra que también se incrementa en la segunda etapa de Educación Secundaria, del 15,8% del año 2000 al 22,2 % de 2011.
Por sexos, el porcentaje de hombres que cuentan sólo con estudios inferiores a la primera etapa de Educación Secundaria ha pasado del 34,7% en 2000 al 17,3% en 2011, al igual que el de las mujeres, del 39,6% al 18,5% en el mismo periodo.
Esta tendencia continúa en la primera etapa de Educación Secundaria, en la que el nivel de formación va del 25,4% en 2000 al 30,3% en 2011 para los hombres, y del 23,4% al 26,4% para las féminas; en la segunda etapa de Educación Secundaria, al pasar del 16,3 al 22,1% en los hombres y de 15,2 a 22,3 en las mujeres; y en Educación Superior, que se sitúa en el 30,3% el año pasado en los hombres (frente al 23,6 del año 2000) y el 32,8% en las mujeres, frente al 21,8%.
Por segmentos de población, el porcentaje de jóvenes de entre 16 y 19 años titulada al menos en Educación Secundaria Obligatoria o niveles similares en España también se reduce, del 79,8 en 2000 al 72,6 en 2011, un descenso que se repite entre los jóvenes de 20 a 24 años titulados al menos en Educación Secundaria Obligatoria o niveles similares, que baja de 90,5 a 83,8 en la última década.
Además, el porcentaje de población de entre 20 y 24 años que ha completado al menos el nivel de la segunda etapa de educación secundaria ha pasado en España de 66,0 a 61,7 en este mismo periodo, mientras que, en este caso, la media europea ha sido constante, al pasar del 76,6 en el año 2000 al 79,5 en 2011. Por otro lado, el porcentaje de población de entre 25 y 29 años con estudios en educación superior en España también se ha estabilizado, con un 38,7% en 2000 y un 37,4% en 2011.
Además, el año pasado, el porcentaje de población de 15 a 29 años que no estudiaba ni trabajaba fue del 21,1%, frente al 15,4% de la media europea. En el caso de los jóvenes de entre 25 y 29 años, el porcentaje asciende al 25%, frente al 19,8% comunitario. Entre los jóvenes de 15 y 17 años, la media en España se sitúa en 6,1 (frente al 3,1 europeo) y entre los 18 y 24, la cifra se eleva a 23,1 (16,7 en el caso de la UE).
A MÁS ESTUDIOS, MAYOR TASA DE ACTIVIDAD Y EMPLEO
Respecto al nivel educativo y estatus laboral, la tasa de actividad de la población de entre 25 y 64 años en el año 2011 alcanzó en España el 79,5 por ciento. Por tipo de estudios, aquellos con educación primaria e inferior tienen una tasa de actividad de 57,7 frente al 79,3 de los que poseen la primera etapa de Educación Secundaria; el 83,6 con la segunda etapa de Educación Secundaria y el 89,3 con educación superior.
En comparación con el resto de países de la Unión Europea, la tasa media europea de actividad de población con estudios de primera etapa de Educación Secundaria e inferior es de 62,8; con segunda etapa de Educación Secundaria llega al 79,2; y con Educación Superior del 88,2.
Además, en 2011, la tasa de empleo entre la población de 25 a 64 años alcanzó en España una media de 64,0. Por estudios, en aquellos con educación primaria e inferior, la tasa alcanza el 40,0; el 59,9 en la primera etapa de Educación Secundaria (frente al 53,5 de media europea); el 67,5 en la segunda etapa de Educación Secundaria (73,2 en la UE) y del 78,9 en Estudios Superiores, frente al 83,7 europeo.
Por otro lado, las tasas de paro entre los 25 y 64 años, según nivel de formación alcanzado, se ha elevado en España en la última década, al pasar de 12,1 en 2000 al 19,5 en 2011. Este incremento se repite en todos los niveles de estudios, ya sean primarios (de 14,2 pasa a 30,7), de primera etapa de Secundaria (de 13,4 a 24,5) y de segunda etapa de Secundaria (de 11,3 a 19,3). Sin embargo, en el caso de los estudios superiores la tendencia queda minimizada, al pasar de 9,2 en 2000 a 11,7 en 2011.
En esta última década, la tasa de abandono temprano de la educación entre jóvenes de 18 a 24 años ha pasado en España de 30,8 a principios de siglo a 26,5 en 2011, de los que 11,3 trabaja y un 15,3 no trabaja. Por último, el porcentaje de población que abandona prematuramente el sistema educativo según los estudios máximos de la madre es del 31,8 en aquellas con estudios primarios o inferiores; del 37,1 para las de estudios medios y de 3,5 para las de superiores.
