SEVILLA, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El número de inmigrantes llegados a las costas andaluzas ha aumentado en lo que va de año con respecto al mismo periodo de 2005 aunque, por contra, la entrada de menores no acompañados ha descendido un 13,3 por ciento, de los 814 del pasado año a los 705 del presente, con datos a 30 de octubre.
El delegado del Gobierno en Andalucía, que hoy inauguró con la consejera de Gobernación, Evangelina Naranjo, unas jornadas sobre inmigración en el ámbito municipal, detalló a los periodistas que a pesar de que en los últimos meses pudiera parecer que han llegado a la comunidad un "aluvión" de personas inmigrantes, no llegan a 450 los que han llegado de más con respecto a 2005, "año que fue excepcionalmente bajo en la llegada de pateras". "Adelanto que en los próximos años difícilmente se va a llegar a las cotas alcanzadas en 2005, porque se bajó mucho", avanzó.
No obstante, el delegado indicó que el número de menores inmigrantes ha bajado en este periodo "a pesar de que se pueda tener una sensación contraria". Advirtió de la particularidad de los menores inmigrantes ya que, mientras los adultos se pueden repatriar a sus países de origen, los menores permanecen bajo la tutela de la Administración ante la imposibilidad de la devolución a sus familias, "y llega un momento en que las posibilidades son las que son".
De hecho, según los datos aportados por la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social a Europa Press, se han atendido en Andalucía a más de 1.900 menores mientras en los centros de protección de la Junta permanecen en torno a un millar, con datos de los nueve primeros meses del año. Según precisaron, "llegan menos pero permanecen más tiempo".
Para el delegado del Gobierno, sin embargo, la llegada de inmigrantes por mar no es la principal vía. "Significativamente no es una cifra elevada porque los grandes números suelen ser las fronteras terrestres o los aeropuertos", agregó.
Por todo ello, López Garzón señaló que "la idea debe ser muy clara" sobre la entrada ilegal de personas procedentes de otros países. "Debe ser por cauces legales porque, tarde o temprano, las personas que llegan tienen que volver a sus países", aseveró.
Para la consejera de Gobernación, Evangelina Naranjo, el "agujero negro" de la inmigración es la entrada irregular de inmigrantes, por lo que se puso a disposición del Gobierno para seguir colaborando en esta materia "y poner cierre a esta circunstancia que va en detrimentos de los derechos humanos de la población inmigrante y en beneficio de los traficantes". Por contra, ensalzó la buena acogida de esta población en Andalucía y la disposición de los extranjeros a aceptar el sistema democrático nacional.
En su intervención en las jornadas, la consejera destacó los fondos de integración recibidos por la comunidad en los dos últimos años, "por primera vez desde que se inició este fenómeno en la comunidad en 1987, cuando comenzamos a pedir ayudas". Naranjo reconoció que los fondos que se destinan alos ayuntamientos para la acogida e integración de inmigrantes no son suficientes aunque valoró "que se haya pasado de cero a 20,5 millones recibidos este año".
Preguntada sobre la llegada de inmigrantes temporeros, señaló que ya se han celebrado reuniones de los foros provinciales en Jaén y Córdoba y aludió a la apertura de albergues municipales, que son competencia de los alcaldes, como el que ya se ha abierto en Jaén. Descartó que se haya producido alguna incidencia hasta el momento y alabó la colaboración con sindicatos, organizaciones agrarias y empresariales para recibir a los contingentes. "Las jornadas agrícolas no deben ser un problema sino todo lo contrario, es una mano de obra inmigrante que ordenada y regulada necesitamos para la economía de Andalucía", concluyó.