MADRID, 5 May. (EUROPA PRESS) -
El mes de mayo es una de las épocas del año preferidas para 'pasar por el altar', pero cada vez más las parejas españolas que deciden contraer matrimonio optan por "negociar" un régimen económico estipulado, tendencia esta que se confirma como "necesaria" para evitar futuros conflictos entre los cónyuges, según el abogado de la asesoría jurídica Servicios Jurídicos Letra2, Felipe Fernández.
El letrado indicó a Europa Press que las cifras hablan por sí solas y recordó que sólo durante el año 2004 se produjeron 134.931 rupturas matrimoniales, lo cual ha llevado a muchas parejas a plantearse el concepto de "justicia preventiva".
Así, Fernández explicó que a efectos legales el matrimonio es "un acto muy importante", al que se refirió como "negocio jurídico" desde ese aspecto por lo que es "necesario asesorarse previamente". "Aunque la gente cree que va a ser para toda la vida, en la práctica se demuestra que muchas veces no es así, por ello hay que estar preparado", señaló.
En este sentido, subrayó que numerosos problemas de índole económica se presentan en el momento de la ruptura. "Al principio todo es muy bonito, pero cuando finaliza ese proyecto común, empiezan los problemas de quién se queda con la casa y con el coche", apuntó el magistrado de Letra2.
Para evitar estos problemas, apuntó que es necesario realizar unas "capitulaciones matrimoniales" y "eliminar el tabú" a la hora de hablar sobre la posibilidad de la separación. "Si desaparece ese tabú, se podrán evitar situaciones trágicas e infinidad de problemas que se presentan por no habernos asesorado antes". explicó.
Según Letra2, aunque el índice de españoles que consultan estos servicios es bajo todavía --un 5 por ciento--, se debe principalmente a que el trabajo de un abogado se asocia con "un alto desembolso económico y realmente no tiene por qué ser así", aclaró. Sin embargo, indicó que cada vez más parejas optan por planificar más su unión.
"No se conoce el precio real de una asesoría jurídica. Creen que es algo tan caro que no merece la pena, pero realmente no saben las consecuencias que pueden tener el no adoptar un régimen económico matrimonial", concluyó.
