MADRID, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo, ha mantenido una reunión este martes 15 de diciembre con los representantes la Iglesia Ortodoxa en España, con quienes ha abordado la situación de la comunidad ortodoxa en el país o el seguimiento de las restricciones frente a la Covid-19 durante las ceremonias.
En concreto, se ha reunido con representantes de tres de los patriarcados ecuménicos de la Iglesia Ortodoxa en España: monseñor Policarpo y el archimandrita Rogelio Sáez (Grecia); el obispo Timotei Felician Lauran y el padre Sorin Burlaku (Rumanía), y el arzobispo Nestor Sirotenko y el sacerdote Andrey Kordochkin (Rusia).
Durante la reunión, han expuesto las distintas situaciones de las tres circunscripciones ortodoxas como entidades jurídicas, el seguimiento de la normativa Covid durante las ceremonias y ritos, así como la situación de la comunidad ortodoxa en España, con la que continuarán trabajando para intentar dar respuesta a sus preocupaciones y necesidades, según ha informado el Ministerio de la Presidencia en un comunicado.
La primera referencia al cristianismo ortodoxo en España data de 1761, si bien su implantación en el país no comenzó hasta mediados del siglo XIX, con la llegada de emigrantes griegos. Actualmente, cuenta con 145 entidades inscritas en el registro oficial, de las que 125 pertenecen al Obispado rumano.
Con esta reunión concluye la ronda de contactos con entidades religiosas iniciada por la vicepresidenta primera del Gobierno desde que asumió la competencia sobre el derecho a la libertad religiosa.
En esta ronda, Calvo se ha reunido no solo con las confesiones que tienen acuerdo de cooperación con el Estado, como son la Iglesia Católica, la Comisión Islámica de España, la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España y la Federación de Comunidades Judías de España, sino también con las confesiones de notorio arraigo: la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, los Testigos de Jehová, la Unión Budista de España y la Iglesia Ortodoxa.
Según informa el Ministerio de la Presidencia, esta agenda se enmarca en la prioridad del Gobierno por "profundizar en la neutralidad de los poderes públicos", así como en "la normalización de la diversidad religiosa y el reconocimiento de las minorías".