MADRID, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -
Cáritas Española ha organizado en Bruselas, junto con Cáritas Austria y Cáritas Europa, una mesa redonda sobre el tema 'Sistemas sostenibles de alimentación hacia un enfoque universal del derecho a la alimentación' en el marco de la agenda de actividades programadas dentro de los Días Europeos de Desarrollo, que se celebran este miércoles y jueves en Bruselas por el Año Europeo de Desarrollo.
Por parte de Cáritas Española están presentes Ana Abril y Amparo Alonso, expertas del Equipo de Incidencia y Comunicación. Además de coordinar los debates de la mesa redonda, está previsto que se reúnan con algunos europarlamentarios españoles para trasladarles la posición de Cáritas Española en esta materia.
Durante este debate, en el que intervendrán seis expertos internacionales, se abordarán ideas y ejemplos prácticos sobre cómo la UE, los gobiernos y las diferentes organizaciones del sector social pueden contribuir a superar las dificultades de acceso a los mercados a las que se enfrentan los productores para mejorar el derecho a la alimentación.
Además, se presentará el estudio de un proyecto de cooperativas multiservicio impulsada por Cáritas en Meki (Etiopía) y la experiencia de un consultor de Cáritas Española, experto en desarrollo rural.
Según recuerda Cáritas, en muchas zonas rurales de África, como es el caso de Etiopía, la seguridad alimentaria depende de dos factores clave: el consumo de productos alimenticios producidos en el ámbito familiar y el consumo de alimentos comprados en el mercado. Y la ruptura de este esquema puede derivar en una situación alarmante de inseguridad alimentaria.
Algunos de estos puntos de ruptura, según señala, pueden ser causados por la baja productividad agrícola, por un débil acceso a utensilios agrícolas o técnicas avanzadas que ayuden a resolver problemas como la infertilidad de la tierra, pérdida de ganado (debido a enfermedades), o por problemas derivados de la dependencia de las lluvias.
Otro de los puntos conflictivos que generan mayor brecha es la baja capacidad de almacenaje de los cereales a escala familiar, de tal manera que los productores se ven obligados a vender su producción de cereales por no disponer de un lugar donde almacenar el grano que consumen durante el año.
Igualmente, la falta de acceso a los mercados, tanto para venta de la producción familiar como para la compra de otros productos alimenticios es otro factor determinante, según apunta la organización.
En el caso de Etiopía, Cáritas alerta de la alta volatilidad de los precios de los cereales, que son muy bajos inmediatamente después de la cosecha y se disparan antes de que la siguiente cosecha esté lista (febrero-agosto). Los productores se ven obligados, al no tener donde almacenar el grano, a vender la mayor parte de la producción a muy bajo precio y a acudir más tarde a comprar esos mismos cereales a costes muy elevados.
