BARCELONA 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Parlament dio hoy luz verde al inicio del trámite de la Ley del Libro Segundo del Código Civil relativo a la familia que, entre otras cosas, obliga a comunicar a los hijos adoptados que lo son como máximo a los 12 años.
La ley también establecerá que, en caso de desacuerdo de los padres tras una separación, la custodia de los hijos será compartida, a diferencia de hasta ahora, que la custodia compartida se aceptaba sólo previo acuerdo. La norma contempla la posibilidad de custodia individual cuando esta sea la más adecuada para los hijos.
Los grupos del Govern rechazaron las enmiendas a la totalidad que presentó CiU, quien ve en la ley un "alto grado de intervencionismo e injerencia", y C's, quienes creen que la norma se "repite" demasiado en algunos elementos que contempla la Constitución, entre otras cosas. Las enmiendas recibieron el apoyo de 65 diputados de CiU, C's y PP y fueron rechazadas por 70 diputados del tripartito.
Para la consellera de Justicia, Montserrat Tura, el objetivo de la norma es "modernizador", y no pretende entrometerse en la vida íntima de los catalanes, sino que la ley responde a la necesidad de actualizar el sistema normativo para evitar los conflictos.
El Código reconoce todas las tipologías de familia y, por primera vez, las familias reconstituidas, que se regulan para evitar problemas. Regula por primera vez los acuerdos amistosos de separación y se fija su régimen de validez.
CIU: "PROYECTO INTERVENCIONISTA"
La diputada de CiU Núria de Gispert dijo que el proyecto es intervencionista hasta el límite de "entrar en el comedor de tu casa, llegando al ridículo". Es más, consideró que la ley "modifica de forma excesiva aspectos legales que afectan a la libertad individual de les personas", porque no se limita a regular situaciones de discrepancia.
Criticó que se obligue a comunicar a los hijos adoptados que lo son y a qué edad debe hacerse. Deploró el lenguaje "extravagante" y equívoco del proyecto de ley, que recriminó que no hable, por ejemplo, abiertamente de 'custodia compartida' en lugar de optar por la fórmula de "responsabilidad parental con carácter compartido".
Para De Gispert, hubiera sido mejor la modificación de artículos concretos en lugar de un cambio en profundidad. Lamentó también la ley supone la "españolización" del derecho civil catalán, algo que negaron los partidos del Govern.
El portavoz adjunto de C's en el Parlament, José Domingo, coincidió con el "intervencionismo" de la norma, que, además, se "repite innecesariamente" con la Constitución. Tras lamentar los "excesos legislativos" del Govern, vio "grave" la obligación de comunicar a los adoptados que lo son.