MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
La secretaria General de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), Estrella Galán, ha explicado este martes que el cierre de fronteras en Francia consecuencia de los atentados del viernes impide a los refugiados que han pedido asilo en España trasladarse, como muchos venían haciendo, a otros países de la Unión Europea. Este fin de semana, un primer grupo recibió el alto en la Junquera y fue devuelto a Madrid, punto de salida.
Lo ha explicado en un encuentro informativo que han organizado Oxfam Intermón y CEAR y en el que han participado el director del Departamento de Campañas y Ciudadanía de Oxfam Intermón, Jaime Atienza; la responsable del área jurídica de CEAR, Paloma Favieres; su homóloga en el programa de Acogida, Mónica López; y el fotoperiodista de Oxfam Intermón, Pablo Tosco, recién llegado de Serbia.
Aunque en CEAR se mantienen "a la espera de lo que pueda suceder" sobre los refugiados y las políticas que les afectan tras los atentados, Galán ha explicado que manejan ya la "hipótesis" de que "va a haber un cambio de tendencia" en España, que ha sido país de tránsito para muchos solicitantes de asilo en su camino al centro de Europa y puede dejar de serlo si persiste el bloqueo en la frontera de Francia, paso obligado.
"Este fin de semana ya hemos tenido la primera respuesta de un intento de cruce de fronteras donde se ha devuelto a un grupo de refugiados", ha señalado Galán en relación al paso entre la Junquera, en Cataluña, y el territorio francés, donde se han restablecido los controles fronterizos galos y españoles a raíz de los atentados.
Según contaron a CEAR los propios afectados, las autoridades dieron el alto en la Junquera a un autobús procedente de Madrid en el que viajaban varios refugiados que habían pedido protección en España. Portaban como documentación la tarjeta de solicitante de asilo, un documento no autoriza el cruce de fronteras, como recoge expresamente, y con el que a falta de controles, muchos estaban viajando a Suecia o Alemania.
"Aquí había un fenómeno que se centralizaba fundamentalmente en salidas desde la estación de autobuses de Méndez Álvaro, en Madrid. Entendemos que va a haber un cambio de tendencia y que estos refugiados que están intentando llegar a Alemania o a Suecia ya no van a tener tanta facilidad para moverse por Europa", ha señalado Galán. Vaticina que "no va a haber posibilidad de movimiento interno de refugiados en Europa".
La secretaria General de CEAR no se ha pronunciado sobre las consecuencias que esto podría tener sobre el sistema nacional de asilo (2.000 plazas de acogida y un itinerario de protección de unos dos años), si bien ha mostrado su confianza en que el programa de la Comisión Europea se mantenga "y los refugiados comiencen su proceso de integración en el Estado donde se hayan reubicado".
Con todo, en España hay medidas que tomar, pues como ha señalado Jaime Atienza, "no está muy bien ni en acogida ni en abordar las causas de origen", pues ha sido el país europeo que más ha recortado en la crisis su ayuda oficial al desarrollo y en especial, la partida de ayuda humanitaria.
Mónica López, por su parte, ha destacado que si bien las plazas de acogida hoy "cubren perfectamente la demanda", para recibir a todos los reasentados de la UE va a haber que "redimensionar" el sistema y dotarlo de recursos, y ha destacado además que las dilaciones en el procedimiento de asilo producen una "asincronía" con los recursos de protección, pues hay personas que salen del programa sin tener aún el estatuto.
Mientras, Favieres ha señalado carencias del sistema de asilo, como el volumen de solicitudes pendientes de resolución (12.000 al cierre de julio), el trato que reciben determinadas nacionalidades porque la Administración "espera a que el conflicto escampe para luego poder denegar" la petición; las trabas en el acceso hasta los puestos de Ceuta y Melilla o el hecho de que la ley, de 2009, aún no tiene Reglamento, así que no se aplican novedades como la posibilidad de que las embajadas trasladen solicitantes a España.
La letrada ha señalado que en CEAR ya tienen la confirmación oficial de que el reglamento de la Ley de Asilo no va aprobarse tampoco en esta legislatura y esperan que, por lo menos, sí lleguen a ponerse en marcha medidas anunciadas como el refuerzo de personal en la Oficina de Asilo y Refugio para poder tramitar con más agilidad los expedientes pendientes y responder a los solicitantes de asilo que llevan "hasta tres años" en espera.
