MADRID, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y obispo de Bilbao, monseñor Ricardo Blázquez, reiteró hoy "la esperanza" del Episcopado por alcanzar la paz y "la disponibilidad de la Iglesia a contribuir en este proceso", tras el anuncio el pasado 22 de febrero del alto el fuego permanente por parte de la banda terrorista ETA.
"El comunicado de la organización terrorista ETA ha suscitado un haz de sentimientos: alivio, alegría, prudencia, cautela, responsabilidad y, por encima de todo, esperanza", aseguró Blázquez durante su mensaje inaugural de la LXXXVI Asamblea Plenaria que comenzó hoy en la Casa de la Iglesia y que se prolongará hasta el próximo viernes.
El número uno de la Conferencia Episcopal insistió en la esperanza "pese a que en intentos anteriores no se llegara al fin deseado de la desaparición de la violencia terrorista y de la misma organización".
Asimismo, el presidente de la CEE recordó que la "unidad de los gobernantes y representantes políticos, la colaboración de la sociedad, el trabajo paciente, la altura de miras y la esperanza que sostiene en el camino, a pesar de los obstáculos, son buena garantía para llegar a la meta de la paz plena".
Frente a la "trascendencia de este desafío", el obispo de Bilbao pidió a Dios que ilumine y dé acierto a quienes tienen la responsabilidad específica de conducir este proceso". Por último, recordó "la disponibilidad" de la Iglesia, ya manifestada también por los obispos vascos, "a contribuir en este proceso en la medida de sus posibilidades".
La semana pasada, el secretario general y portavoz de la CEE, el padre Juan Antonio Martínez Camino, aseguró horas después del anuncio de la banda terrorista, que pese a que el Episcopado se alegraba por la noticia, consideraba que no era "suficiente", ya que, a su juicio, ETA debía anunciar "su disolución que es lo que esperan los ciudadanos de bien".
Martínez Camino afirmó también en esa oportunidad que ETA no podía "en modo alguno poner ningún tipo de precio al respeto a los derechos fundamentales de las personas, ni al funcionamiento normal de las instituciones democráticas que son las que tienen la legitimidad y la encomienda de velar por la solidaridad y el bien común de España".
"TAREA DE OTRA NATURALEZA"
Por otra parte, y sobre la labor de la Iglesia en este eventual proceso de paz, el arzobispo de Madrid, monseñor Antonio María Rouco Varela, se encargó de dejar en claro el fin de semana, durante el Consistorio celebrado en Roma en el que monseñor Antonio Cañizares fue nombrado cardenal, que no es misión de la Iglesia sino de los políticos la mediación con ETA.
Preguntado sobre una posible mediación de la Iglesia con ETA, el cardenal Rouco Varela puntualizó a Europa Press que "la Iglesia está formada por personas concretas" para aludir que cada uno tiene su posición, y añadió que de todas maneras, "este asunto lo tienen que asumir los políticos responsablemente".
"Nosotros tenemos una tarea de otra naturaleza pero muy importante para que el bien de España quede a salvo y es que las víctimas de este grandísimo proceso tengan lo que se merecen", dijo el purpurado.
Rouco no quiso entrar en valoraciones sobre la tregua y comentó que esperaba sólo que "el futuro más inmediato de España sea un futuro donde la paz y la solidaridad y donde el sentido de responsabilidad de todos los españoles se ejercite a fondo y por el bien de todos".
