VALENCIA, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, ha mostrado este viernes su "descontento" ante la medida adoptada por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de autorizar un trasvase desde el Tajo al Segura de 15 hectómetros cúbicos, "cinco menos de los que se hubieran podido aprobar por ley", y ha reafirmado su compromiso de "permanecer al lado de los regantes de la provincia".
El Gobierno de Castilla-La Mancha anunció su intención de cesar el trasvase Tajo-Segura al considerar que los pantanos de Entrepeñas y Buendía están por debajo de los límites para traer agua a Alicante y Murcia.
Al respecto, Sánchez, que ha hecho estas declaraciones a los medios tras la presentación de la novena etapa de la Vuelta Ciclista a España que transcurrirá el próximo domingo en la provincia de Alicante, ha invitado al Gobierno de Castilla-La Mancha a trabajar "conjuntamente" en esta materia.
No obstante, ha criticado la actitud del presidente de esta comunidad, Emiliano García-Page, y de su partido, el PSOE, y les ha pedido que no utilicen "electoralmente el tema del agua porque vienen unas elecciones generales".
Asimismo, ha reprochado al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que "no haya estado defendiendo a los regantes durante este mes de agosto". En este sentido, ha avanzado que desde la Diputación van a lanzar un frente de diálogo con Castilla-La Mancha "para dar sensatez a un acuerdo que se produjo entre el Gobierno de España y cinco comunidades autónomas".
"El agua es de todos los pueblos de España y hay que llevarla de donde hay a donde no hay, como ocurre también con la financiación económica", ha concluido César Sánchez, quien ha apelado a la "solidaridad interterritorial".
