BILBAO, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
El tío de Paco Larrañaga expresó hoy su satisfacción porque se haya confirmado la anulación de la pena de muerte para su sobrino y consideró que "se abren expectativas" para que pueda tener "un juicio justo". No obstante, señaló que la familia esperaba "el perdón total" por parte de la presidenta filipina, Gloria Macapagal Arroyo, para el preso de origen vasco porque "es inocente".
"Nosotros en navidades esperábamos que la presidenta usara la prerrogativa de conceder el perdón y que no fuera conmutación de penas sólo, pero, en fin, hoy es el día de alegrarnos de la nueva situación de Paco y se abren expectativas para que haya vías con el fin de que Paco pueda tener un juicio justo", aseguró Paco Larrañaga.
En su opinión, "se ha producido un salto cualitativo de condena de muerte a cadena perpetua". "Estamos en una nube porque estábamos con el alma en vilo. Por lo menos, hay expectativas de vida amplias para Paco y, si hubiera contingencias políticas, otro que llegara al poder en Filipinas podría llevar a efecto la pena de muerte", apuntó.
El tío del recluso consideró que "ahora se abren otras puertas" para que, "más pronto que tarde, esté en la calle". "Pedimos un juicio justo y con garantías porque hubo muchas irregularidades en el proceso y en el juicio", añadió.
EL CORREDOR DE LA MUERTE
A su entender, "no ha habido garantías procesales" y eso ha llevado a Larrañaga a prisión. "Ahora, creo que el corredor de la muerte ya no existe prácticamente en Filipinas físicamente porque a casi todos se les ha conmutado la pena de muerte. Me imagino que físicamente habrá un traslado del corredor de la muerte, aunque no sabemos cuándo. De momento, seguirá en el corredor de la muerte, pero ya no con el mismo sentido", dijo.
Para la familia, "esto es importante psicológicamente" para Paco Larrañaga. "Ayer recibirían la noticia y se les habrá abierto el cielo, no sólo a Paco, sino a todos los presos a quienes se les ha conmutado la pena", señaló.
Por último, agredeció a la ciudadanía, a las instituciones vascas y a la Administración central, así como al Rey, la labor realizada para lograr que se haya dado este paso y "se puedan abrir nuevos procedimientos" para la puesta en libertad del preso.
