Actualizado: martes, 24 julio 2012 18:55
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FIGUERES (GIRONA), 24 Jul. (EUROPA PRESS) -

   Un foco del incendio del Empordà entre Terrades y Boadella d'Empordà, al sur del pantano de esta última localidad, se ha reavivado ligeramente en las últimas horas e impide que el incendio pueda entrar en fase de control, ha informado el conseller de Interior, Felip Puig.

   Puig ha comentado que por la orografía difícil y por problemas para que llegue la maquinaria pesada, en este punto se han retirado los efectivos humanos para dejar trabajar activamente a los aviones y helicópteros.

   En este sentido, ha avanzado que un tramo de la línea eléctrica se desconectará para que los aviones franceses --más grandes y con otros protocolos de seguridad-- puedan trabajar con total garantía, para que el incendio pueda entrar en fase de control a lo largo de este martes.

   "Las condiciones climatológicas han permitido trabajar muy bien, la situación está razonablemente estable y si no fuera por este punto de riesgo que en estos momentos requiere la concentración de casi todos los medios aéreos disponibles podríamos estar en fase de control", ha apuntado el conseller en una atención a los medios en el centro de mando del parque de bomberos de Figueres.

   Gracias a las buenas condiciones climatológicas de la mañana, el resto del perímetro ha quedado estable y los demás focos activos de Cantallops, Agullana y Darnius están controlados, aunque no se puede bajar la guardia ni dar el incendio en fase de control.

   Como en estos puntos se mantiene una evolución favorable, los municipios de Darnius, Agullana, y La Vajol, seguramente podrán dejar de estar bajo confinamiento, según el conseller.

   Ese foco conflictivo de Boadella ha provocado que tuvieran que desalojarse siete personas de una masía, además, ha habido dos pequeñas incidencias: un bombero ha resultado herido leve con una motosierra y un camión de la UME ha volcado y sus ocupantes han resultados contusionados.

   Puig también ha puntualizado que todavía hay seis heridos en los hospitales, los del Josep Trueta de Girona han pasado de la unidad de vigilancia intensiva a planta, y de los cuatro que están en el Hospital de la Vall d'Hebron, tres están estables y uno continúa en estado crítico.

   La entrada del viento de marinada ha disuelto la nube de humo que cubría el Empordà, dos casas siguen sin suministro eléctrico y seis municipios están sin teléfono por lo que se ha pedido a la compañía un calendario de reposición; mientras que los 120 jóvenes que habían sido desalojados de Albanyà a Figueres finalmente han sido recolocados en Torroella de Montgrí.

   El perímetro está afectando un total 13.950 hectáreas, mientras que la zona quemada es de unas 10.000 hectáreas.

 

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