MADRID 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los seis obispos miembros del Comité Ejecutivo y el secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), el padre Juan Antonio Martínez Camino, subrayaron hoy que la llamada "atención educativa" que el Gobierno dispensará a los alumnos que no cursen la asignatura de Religión católica en la educación primaria "no garantiza que quienes sí la cursen lo hagan en condiciones de no discriminación".
El Comité Ejecutivo de la CEE, reunido hoy, expresó su "seria preocupación" por esta cuestión y argumentó que esto implica dejar "sin tutela adecuada" el ejercicio del derecho de los padres "que piden libremente cada año, en proporciones altísimas, que sus hijos cursen la religión católica". "Elegir la educación religiosa y moral que desean para sus hijos es un derecho constitucionalmente reconocido que, además, el Estado se ha obligado a tutelar en virtud de sus Acuerdos con la Santa Sede", precisó.
El Comité Ejecutivo de la CEE abordó durante la reunión de hoy el tratamiento que recibe la Religión en el Real Decreto que regula las Enseñanzas mínimas de la educación primaria, publicado en el Boletín Oficial del Estado el pasado 8 de diciembre. No obstante, adelantó que no emitirá una "valoración detallada" sobre la situación en la que quedará esta asignatura y el profesorado que la imparte hasta que no hayan sido aprobados los decretos de todas las etapas educativas.
Respecto a la propuesta de regulación de la estructura del Bachillerato enviada por el Ministerio de Educación y Ciencia a las Comunidades Autónomas, la CEE denunció que en la misma no se hace mención alguna a la asignatura de Religión, lo que supondría un incumplimiento flagrante de los Acuerdos entre el Estado español y la Santa Sede, además de menoscabarse el derecho de padres y alumnos a recibir esta enseñanza.
No obstante, la CEE matizó que desde el Ejecutivo se le ha asegurado que esto no significa que en el Real Decreto que en su momento se publique no vaya a contemplar la Religión como asignatura de oferta obligatoria en el Bachillerato.
Durante la reunión de hoy, el Comité Ejecutivo de la CEE abordó también el tratamiento de la 'Educación para la ciudadanía y derechos humanos' en el mencionado Real Decreto. A este respecto, los obispos criticaron que esta nueva asignatura comporta "el riesgo de una inaceptable intromisión del Estado en la educación moral de los alumnos, cuya responsabilidad primera corresponde a la familia y a la escuela".
La CEE precisó, no obstante, que no se opondría a una educación para la convivencia siempre que esta no suponga una "formación moral de las conciencias de los alumnos impuesta a todos por los poderes públicos como asignatura obligatoria".
Al terminar la reunión de la Comisión mixta Iglesia-Estado del día 5 de diciembre, ya se adelantó que, a pesar de los esfuerzos realizados por ambas partes, en el desarrollo de la Ley Orgánica de Educación (LOE) --rechazada en su día por la Conferencia Episcopal como no acorde con los Acuerdos entre la Santa Sede y el Estado Español -- persisten dificultades fundamentales en lo que toca a la tutela de los derechos de los alumnos, de los profesores y de la Iglesia.
Los obispos miembros del Comité Ejecutivo son su presidente, monseñor Blázquez; su vicepresidente, el arzobispo de Toledo y Primado de España, monseñor Antonio Cañizares; y los siguientes miembros: monseñor Antonio María Rouco Varela, arzobispo de Madrid; monseñor Carlos Amigo, arzobispo de Sevilla; monseñor Lluís Martínez, arzobispo de Barcelona; monseñor Carlos Osoro, arzobispo de Oviedo, además del padre Martínez Camino.