El instructor del atestado sobre la muerte de Nagore cree que Yllanes no dijo toda la verdad en su primera declaración

Actualizado: martes, 3 noviembre 2009 21:38

Destaca que no se le hizo ningún tipo de prueba de alcoholemia o drogas cuando se le detuvo porque "no presentaba signos" de intoxicación

PAMPLONA, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -

El policía instructor del atestado del asesinato de Nagore Laffage aseguró hoy que cree que el procesado José Diego Yllanes dijo la verdad aunque "no toda" en su primera declaración ante la Policía, en la que señaló, entre otras cosas, que había tapado la boca a la joven irunesa para que no gritase, que había intentado trocear el cuerpo después de matarla y que sólo intentó calmar a Nagore que estaba enfurecida porque pensaba que iba a forzarla a tener relaciones.

Además del instructor del atestado declararon como testigo esta tarde en el juicio por el asesinato de la joven irunesa otros cuatro agentes de la Policía Foral relacionados con la investigación del caso. Mientras todos ellos prestaban declaración, el acusado José Diego Illanes tomó notas cabizbajo y afligido, y comentó con su abogado diferentes cuestiones que se plantearon a lo largo de la sesión. Esta segunda jornada ha estado centrada por la declaración del procesado esta mañana que se prolongó durante más de tres horas.

El primer testigo de la Policía Foral, instructor del atestado, declaró que en el primer contacto que tuvo en Erro con el acusado, José Diego Yllanes, una vez que ya había sido detenido, se encontraba "abatido". Tras hacerle la lectura de derechos, explicó, que lo "único" que le dijo fue que "estaba muy borracho y que no se acordaba de nada". "Éste fue el único diálogo que tuve con él", añadió.

Según manifestó el instructor de las investigaciones llevadas a cabo por la Policía Foral, el procesado "negó en todo momento saber quién era la persona que había fallecido" y aseguró que no la conocía. Preguntado por el fiscal sobre qué podría resaltar de la primera declaración de José Diego Yllanes, el agente señaló que el acusado "lo pasó mal", y explicó que "pensaba las respuestas, sollozaba y estaba en un estado de ansiedad", lo que obligó en un determinado momento a parar la manifestación del detenido que "fue larga".

El testigo recalcó que durante la declaración el acusado "mezclaba el no recuerdo con el puede ser así" y aseguró que cree que José Diego Yllanes "está diciendo la verdad aunque no la está diciendo toda". "Lo que dice creo que es cierto aunque creo que no está diciendo toda la verdad", sentenció.

Respecto a si Nagore y el acusado se conocían antes del 7 de julio, aseguró que "no se ha encontrado nada que nos haga suponer que había una relación anterior entre ambos". "Nagore conocía a José Diego porque era médico de la Clínica Universitaria, ella sabía quién era, pero él no, entendemos que no tenían relación porque en la información de la Clínica Universitaria no hay ningún contacto entre ellos ni en los teléfonos de ambos se encuentran contactos".

Sobre la identificación del cuerpo, el instructor del caso puso de manifiesto que fue "complicada" y que tuvieron "serios problemas" porque "podía ser una chica de cualquier parte del mundo" al celebrarse las fiestas de San Fermín en la capital navarra. Según explicó, se encontraron "un cuerpo envuelto en cinco bolsas de basura rodeado con cinta aislante negra y cinta de embalar, que no llevaba cartera, ni pendientes, ni teléfono ni nada" y destacó que "el pantalón que cubría el cuerpo estaba bajado y se observó que no llevaba ropa interior". "La chica tenía una camisa roja y una sudadera de color blanco, no llevaba nada más", indicó.

El instructor de las investigaciones explicó que no se le hizo ninguna prueba de alcoholemia o drogas al acusado cuando se le detuvo porque se dio por hecho que "no estaba bajo las afluencias del alcohol" y porque "él tampoco lo solicitó", ni "ninguna de las partes". "No es norma habitual en detenidos que no presenten signos el hacerles esta prueba", agregó, tras señalar que Yllanes "estaba influenciado por el alcohol pero no iba haciendo eses, ni balbuceaba".

Preguntado por el abogado defensor sobre si existe alguna prueba de AND en el cuello de Nagore de José Diego Yllanes, el instructor dijo que no, aunque insistió en que en Olondriz se encontraron una serie de evidencias relacionadas con la muerte de la joven irunesa como "el sujetador roto, el tanga, un botón del pantalón, sus dos teléfonos, el dedo y más restos".