MADRID, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Mensajeros de la Paz, el padre Ángel ha presentado este martes 15 de diciembre la campaña 'La persona dignifica al trabajo', que tiene por objetivo poner en valor la actividad profesional de los empleados de hogar, una profesión que "muchas veces es despreciada socialmente", pero de "gran importancia" en la calidad de vida y el desarrollo de las familias españolas.
Se trata de una campaña que quiere incidir también en la necesidad de fomentar la cualificación profesional de las personas que trabajan en el hogar, para cumplir satisfactoriamente con las obligaciones de un trabajo "multitarea", y que requiere de múltiples conocimientos y atención humana, muchas veces a personas vulnerables.
La Fundación Montemadrid y Bankia apoyan los programas de formación, llamados 'Formación en Acción' en los que se fundamenta esta campaña, y han colaborado en la producción y el lanzamiento de un spot sobre la misma.
DAR MISERICORDIA
El Padre Ángel ha querido enmarcar la dignificación del trabajo que desarrollan los empleados del hogar en la celebración del Año de la Misericordia. "Consiste en dar dignidad. (...) Misericordia es compartir con los demás. Merece la pena por un mundo mejor el decir a la sociedad y a los gobernantes que estos proyectos darán o no votos, pero sí dignidad a las personas, sobre todo a las mujeres, que son las que más sufren y menos se las tiene en cuenta", ha subrayado.
Así, ha subrayado que una "gran preocupación" del Papa Francisco es la dignidad del hombre y de la mujer, a su juicio, darles un trabajo digno. "Por eso, Mensajeros de la Paz, desde 1999, da formación a unas dos mil personas al año, de los que el 30% después son contratados y a los que se les hace un seguimiento para que no sean esclavizados", ha apostillado.
¿EN QUÉ CONSISTE EL ANUNCIO?
El anuncio muestra la historia de una joven empleada del hogar en una entrevista de trabajo donde se evidencia la "compleja y variada" actividad de una empleada doméstica. Éste ha sido desarrollado por Grupo Idex, y se difundirá en las redes sociales y plataformas digitales.
Según defiende Mensajeros de la Paz, la idea es que la sociedad entienda que el trabajo de empleada del hogar es "uno más", con formación, proceso de selección, contrato y jornada laboral, como cualquier otro, y sin connotaciones negativas, ni por el tipo de ocupación, ni tampoco por el hecho de que frecuentemente emplea a personas de origen inmigrante.
"Hay que recordar que si podemos trabajar fuera de casa es porque otra persona está en ella cuidando nuestras cosas y atendiendo a nuestros seres queridos", subraya la ONG.
'FORMACIÓN EN ACCIÓN'
En concreto, Mensajeros de la Paz a través del programa 'Formación en Acción' lleva 16 años formando profesionalmente a empleados del hogar, ofreciéndoles un recurso para lograr un empleo digno capaz de beneficiar a personas con dificultad de inserción laboral, y que satisfaga sus necesidades vitales, así como las exigencias de las familias empleadoras.
Estos cursos teórico-prácticos comprenden talleres de formación integral y módulos profesionales especializados de atención en el hogar a menores, personas mayores y personas con discapacidad.
Lucía Antolín es la responsable de estos programa. Ha contado que ella es desde hace muchos años trabajadora del hogar y vive con una familia. "La familia es la primera empresa donde se trabaja en equipo. Hay comunicación, y es tan maravillosa porque todos decidimos que lo más importante del mundo es la familia y los hijos, que los dejamos muchas veces en manos de los empleados del hogar. (...) Es un trabajo que da calidad de vida y si no se les forma no la tienen", ha valorado.
LA EXPERIENCIA
El acto de presentación ha contado con la presencia de un grupo de empleadas de hogar y de empleadoras que han dado testimonio de su experiencia, así como de los creadores de la campaña, del director de Programas Sociales y Educativos de Fundación Montemadrid, Cristóbal Sánchez; y del director de Responsabilidad Social Corporativa de Bankia, David Menéndez.
Paloma, madre de cuatro hijos, ha contado que a lo largo de estos últimos 20 años ha tenido la ayuda de varias trabajadoras del hogar y su balance ha sido "enriquecedor", convirtiéndose ellas en parte de la familia, llegando a ser amiga de ellas.
Marys, una trabajadora del hogar de Santo Domingo, lleva 21 años en España. Vino al país porque en el suyo no le valoraban siendo empleada del hogar. Ha confesado que hoy es "feliz" gracias a la formación que le ha proporcionado Mensajeros de la Paz.
Mariluz ha trabajado durante 30 años como ingeniera de telecomunicaciones y en su casa ha tenido la ayuda de varias empleadas del hogar, sin las que ella reconoce que no hubiera podido desempeñar su desarrollo profesional. Hoy, ya alejada del mundo laboral, colabora como voluntaria en los talleres de formación.
Isabel es una joven de 34 años boliviana que hace una docena de año vino a España para trabajar y conseguir dinero para curar a su hermano enfermo. Trabaja fundamentalmente desde entonces con personas mayores y ahora es madre de dos hijos y estudia, gracias a este programa de Mensajeros de la Paz, para ser auxiliar de enfermería.
Desde la Fundación Montemadrid, Cristóbal Sánchez ha destacado que este proyecto es "muy pertinente" porque reconoce el trabajo de las mujeres, refuerza la integración de los inmigrantes y mejora las condiciones de las personas dependientes. "Hasta ahora, por mucho que se haya legislado y ganado sigue habiendo relaciones laborales encubiertas y economía sumergida", ha advertido.
David Menéndez, responsable de RSC de Bankia, ha subrayado que las principales líneas de colaboración están dirigidas a las personas más dañadas por la crisis y por encima de todo hay que ofrecer empleo. "En España hace falta trabajo digno para las personas", ha precisado.
