La mujer maltratada de San Roque (Cádiz) teme ir a prisión por la supuesta agresión contra dos guardias civiles

Actualizado: sábado, 3 marzo 2007 13:13

SAN ROQUE (CÁDIZ), 3 Mar. (EUROPA PRESS) -

Fe Rodríguez, la mujer que desde el pasado mes de septiembre lleva encadenándose a los juzgados de San Roque, de Algeciras y la Audiencia Provincial de Cádiz tras serle denegada una orden de protección una vez que su marido cumplió la condena de alejamiento por malos tratos, teme ir a la cárcel por la supuesta agresión contra dos guardias civiles por la que fue denunciada el pasado lunes.

En declaraciones a Europa Press, la mujer indicó que está segura de que la juez pedirá para ella pena de cárcel, lo que calificó de "más que demencial". "Por defenderme de los malos tratos voy a ir a la cárcel", aventuró.

Tras ser detenida el lunes prestó declaración ante la juez del Juzgado número uno de San Roque, la misma que le ha denegado la orden de protección y una pensión por el divorcio y que, a según Rodríguez, "protege" a su marido.

Asimismo, Rodríguez afirmó que "se puede dar el caso que al final el maltratador esté en la calle y sin ni siquiera ficha policial, porque nunca fue detenido, y que la maltratada acabe en la cárcel".

Igualmente, se lamentó de la "rapidez" con que tuvo que ir a declarar por estos hechos, "cuando he presentado 16 denuncias contra mi marido y no se ha celebrado ningún juicio y el pasado mes de enero presenté una denuncia contra la madre de mi marido por amenazas y todavía está en el cajón del juzgado".

En la denuncia presentada por la Guardia Civil, a la que tuvo acceso Europa Press, los agentes indicaron que la mujer se encontraba el pasado lunes en la puerta del juzgado de San Roque con una pancarta alusiva a los jueces, por lo que los agentes actuantes comenzaron a realizar fotografías para instruir las correspondientes diligencias.

Según los agentes, la mujer comenzó a tomar una actitud agresiva e insultante, llegando incluso a intentar arrebatar la cámara al agente. Asimismo, indica que durante el forcejeo, le señora intentó quemar con un cigarrillo a uno de los agentes y cogió "fuertemente" por el cuello y el pecho al guardia civil. Además, según la denuncia, la mujer, "una vez que observa" al otro agente, se abalanzó sobre él, que sufrió "un fuerte golpe" en la mano y en el pecho.

Asimismo, los agentes indican en la denuncia por un supuesto delito de atentado, resistencia y desobediencia que una médico forense que se encontraba en el lugar diagnosticó contusión y erosión en cuello, pecho y brazo derecho de uno de los agentes y las mismas lesiones para el otro agente pero en la mano derecha y en el pecho.

Por su parte, la mujer, que sufre diabetes, negó que atentara o agrediera a los dos agentes, ya que se preguntó "cómo una mujer, que apenas puede caminar, se puede abalanzar sobre dos policías, no sobre uno nada más, sino con dos a la vez". Además, calificó de falso el relato preguntándose "cómo es posible que mientras que supuestamente yo agredía a un agente el otro no interviniera y me redujera, sino que me dejara intentar pegarle antes de pegarle a él también".

A juicio de Fe Rodríguez, "a no ser que yo sea un superwoman que tiene dos pares de brazos para poder pegar a los dos agentes a la vez, esto no se entiende".

La mujer se encadenó por primera vez a una sede judicial el pasado día 21 de septiembre a la puerta del juzgado de San Roque porque, según explicó, su marido fue condenado por un delito de malos tratos el pasado 20 de septiembre de 2005 a una pena de ocho meses de prisión, "que no cumplió por no tener antecedentes", y a no acercarse a ella a menos de 200 metros durante un año, cuyo plazo expiró en la noche anterior a su encadenamiento.

La mujer, al serle denegado el derecho a la vivienda, solicitó una orden de protección "que también me fue denegada". Ante esta circunstancia, la salida que vio Fe Rodríguez "para defender" su "vida" fue encadenarse durante unas horas al Juzgado, ya que al ser diabética no podía permanecer demasiado tiempo al tener que seguir un régimen de alimentación.

Fe Rodríguez aseguró que ha sufrido por parte de su ex marido un "estrangulamiento económico total", ya que, entre otras cuestiones, "retiró su nómina de funcionario del Estado de la cuenta corriente conjunta y dejó de abonar absolutamente todo, aunque siguió comprando y acumulando facturas en esta cuenta, las cuales eran devueltas con continuas notificaciones de apremio de embargo". Este hecho, según la mujer, hizo que tuviera que adquirir una "deuda económica importante para evitar esos embargos".

En este sentido, señaló que debido a su estado psíquico y físico (padeció un cáncer y tiene diabetes), no puede trabajar, por lo que no tiene ningún ingreso ni sabe cuándo los tendrá. Además, manifestó que su ex marido "destruyó mi imagen porque me denunció y dijo a todo el mundo que tuvo que separarse porque yo estaba perdiendo la razón y era drogadicta".

La mujer maltratada recordó que su marido "me dejó sorda con uno de sus golpes, me provocó un destrozo físico y psíquico y como hacen todos los maltratadores, nunca permitió hacer separación de bienes, aunque estuvo casi diez años sin trabajar y llevando muy buena calidad de vida a costa de la mujer que maltrató, maltrata y maltratará".

Fe Rodríguez se siente "desprotegida" por la Justicia, así como ésta "protege al maltratador, al que han recompensado en la sentencia de divorcio con mi propio dinero y patrimonio construido con una buena racha de trabajo (Fe Rodríguez es pintora), sin concederme ni siquiera una pensión, sabiendo la precariedad psicológica, física, emocional y económica en que me encuentro". Además, añadió que "para colmo, me quita también, dándoselo al maltratador, hasta el techo que me cobija".