El obispo de Ávila pide a los contribuyentes la asignación tributaria para la Iglesia

ÁVILA 15 May. (EUROPA PRESS) -

El obispo de Ávila, Jesús García Burillo, solicita en una carta a los fieles que señalen la casilla de la declaración del IRPF para que destinen el dinero a la Iglesia "en medio de un proceso de autofinanciación en el que se está trabajando con interés y empeño por parte de la Conferencia Episcopal Española, y mientras se lleva a cabo de un modo justo y progresivo".

La campaña para animar a los fieles a aportar su parte de la declaración a la Iglesia, que lleva por título "Recibir... para poder dar", quiere ayudar a comprender a todos los fieles y, en particular, a aquellas personas que confían en la Iglesia, "que la Iglesia sólo podrá continuar con su labor y desarrollar las tareas que históricamente viene realizando, si se logra un modo de cooperación entre todos".

García Burillo destaca que los ingresos son destinados "fundamentalmente a posibilitar el culto católico en las diferentes parroquias de las diócesis y al desarrollo de los diferentes programas de pastoral (...), en particular las abundantes e importantes obras sociales que lleva a cabo".

A la vez, señala que otro modo de devolver a la sociedad el dinero que la Iglesia recibe es a través del mantenimiento de templos y otros lugares de encuentro que, en una Diócesis como la de Ávila "es una cantidad alta la que se debe aportar a los diferentes convenios de colaboración con diversas instituciones para poder llevar a cabo restauraciones o incluso nuevas construcciones en zonas de creciente población".

"No se debe olvidar -añade- la retribución de los sacerdotes, religiosos y seglares que dedican su tiempo a proyectos pastorales para todo tipo de gente, así como a la atención de las diversas parroquias".

Y suma también el hecho de que "una parte importante del dinero de la Iglesia es dedicado a la Evangelización y el desarrollo de los pueblos del Tercer Mundo", que "nunca será suficiente con estos hermanos que viven en condiciones económicas peores que las nuestras" y que "es un deber moral".