ZARAGOZA, 4 Ene. (EUROA PRESS) -
El obispo de Tarazona, Demetrio Fernández, ha escrito una carta en la que critica la visión que se está ofreciendo de Santa Teresa de Jesús con ocasión del rodaje de una película sobre su vida dirigida por Ray Loriga e interpretada por Paz Vega y después de ver anunciado el rodaje de este film presentando a la santa "como morbosamente sexy", comenta el prelado.
Para Fernández, "hay quienes se empeñan en verlo todo bajo el prisma del sexo. Y ahora le toca a Santa Teresa". El obispo de Tarazona comenta que "que quienes hacen estas propuestas descabelladas suelen acusar a la Iglesia de estar obsesionada con el sexo, de predicar solamente el sexto mandamiento ("No fornicarás"), y resulta que ellos ven sexo por todas partes, ven sexo hasta donde no lo hay".
El prelado lamenta que hay quienes "no saben interpretar la belleza de la vida si no es a través del prisma del sexo. No son capaces de captar la bondad y el bien, si no es proyectando su propio fango sobre personas, realidades y temas que nada tienen que ver con lo que ellos proponen. Permanecen anclados en un freudismo, que hasta el mismo Freud ha superado en sus mejores discípulos".
Ante la afirmación de que la santa "describió sus experiencias místicas como si fueran orgasmos carnales" Demetrio Fernández asegura que "la experiencia mística no es una experiencia neurótica, ni tiene nada que ver con la represión sexual" sino que "brota sencilla y espontánea en el alma que acoge el don de la fe, y, movida por la gracia de Dios, supera todo egoísmo que proviene del pecado y se centra en Dios, como un objeto pesado tiende al centro de la tierra por la fuerza de la gravedad".
"La experiencia mística --continúa el prelado-- conmueve los cimientos de la naturaleza humana, y estremece el alma y el cuerpo de quien la experimenta". Por eso, "sólo desde la fe puede atisbarse en qué puede consistir la experiencia mística" y "cuando uno no tiene fe, es mejor que no toque estos temas, porque los estropea, y encima piensa que está haciendo una obra de arte".
El prelado reclama en su carta, titulada "¡Pobre Santa Teresa!", "respeto" para la santa de Ávila. "El respeto a su intimidad, que otros reclaman para sí. El respeto a la verdad de lo que ella explica en su vida. El respeto a no extorsionar bajo ningún pretexto lo que son sublimes experiencias de Dios y de lo sagrado".
"Pobre Santa Teresa, o mejor, pobres hombres y mujeres, que no saben ver más que sexo en estas experiencias místicas. Quizá el trato con la Santa (ella tiene maña para ganarse a la gente) les lleve a conocer otras realidades más profundas, que no tienen nada que ver con el sexo", manifiesta el obispo.
LECTOR ASIDUO DE SUS OBRAS
El obispo asegura en su misiva que ha leído "muchas veces" las obras escritas por Santa Teresa de Jesús. "Las he leído todas, y recurro con frecuencia a su lectura" porque "me siento implicado en un diálogo que engancha. Me hace reír con sus geniales ocurrencias, me hace pensar cuando se toma en serio la reforma de la Iglesia de su tiempo".
También, afirma, "me invita a la 'determinada determinación' de aspirar a la santidad, como única meta del hombre, que ella tardó en tomarse definitivamente en serio, pero cuando afrontó la determinación se sintió libre como nunca lo había sido antes".
Para Fernández, "es una mujer de las que han hecho historia, antes de que llegara el movimiento feminista. Su literatura, su buen decir, su gracejo la colocan en los primeros puestos de la literatura castellana".
Además, recuerda que ha sido declarada doctora de la Iglesia, "por sus felices explicaciones acerca de la vida espiritual, particularmente por la inteligencia de la humanidad de Cristo en la mediación de nuestro trato con Dios".
"En fin --comenta el prelado--, es una mujer muy completa. Realmente en ella aparece el genio femenino, que cautiva a lector, sea hombre o mujer. Y mucho más al lector creyente, porque le introduce en los caminos del espíritu, que ella ha recorrido con éxito y enseña magistralmente a los demás".
