Los obispos instan a las familias a vivir en parroquia ante una sociedad "descristianizada"

Actualizado: lunes, 18 diciembre 2006 13:45

De cara a la Jornada de Familia y Vida, el 31 de diciembre, señalan que la parroquia puede ayudar a los esposos a superar sus "problemas"

MADRID, 18 Dic. (EUROPA PRESS) -

Los obispos instaron hoy a las familias españolas a vivir en parroquia, "el ámbito más cercano para vivir en la Iglesia", según se desprende de su mensaje con motivo de la Jornada de Familia y Vida 2006, que se celebra el próximo 31 de diciembre, mediante el que denuncian que actualmente la sociedad esta "descristianizada" y señalan a la parroquia no sólo como lugar de celebración de "acciones sagradas", sino para ayudar a los miembros de la familia en los "problemas que les puedan superar".

El texto, al que tuvo acceso Europa Press, se titula 'Vivir en parroquia, vivir en familia' y está ratificado por los obispos de la Subcomisión Episcopal de Familia y Vida: Julián Barrio Barrio, presidente de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar (CEAS); Juan Antonio Reig Pla, presidente de la Subcomisión para la Familia y Defensa de la Vida; Francisco Gil Hellín, Javier Martínez Fernández y Vicente Juan Segura.

Así, los obispos desean que los días navideños sirvan a los españoles para "estrechar los lazos familiares y la comunión eclesial de las familias que se reúnen en las parroquias para la celebración de los misterios de la Navidad".

Los prelados inician el texto recordando que el Papa Benedicto XVI reafirmó durante el V Encuentro Mundial de las Familias (EMF), celebrado el pasado mes de julio en Valencia, que "la familia, fundada en el matrimonio (la unión indisoluble entre el hombre y la mujer), es una institución insustituible", un "valor fundamental" que la Iglesia no puede dejar de anunciar y promover", además de un "ámbito privilegiado" para "dar y recibir amor" y educarse "en la fe".

Por tanto, añaden, la familia "es sujeto y protagonista de la pastoral de la Iglesia". "Las parroquias son el ámbito más cercano para vivir en la Iglesia. Por eso, en esta Jornada de Familia y Vida de 2006 subrayamos la importancia de la parroquia en la pastoral familiar: 'Vivir en parroquia es vivir en familia'".

LA IGLESIA ES NECESARIA.

Para la Iglesia, "una de las principales acciones pastorales es el acompañamiento a las familias", puesto que la familia cristiana, para poder vivir, necesita a la Iglesia". En este sentido, destaca que la comunidad eclesial "tiene la responsabilidad de ofrecer acompañamiento, estímulo y alimento espiritual que fortalezca la cohesión familiar, sobre todo en las pruebas o momentos críticos", labor en la que "tanto la parroquia como las diversas asociaciones eclesiales son muy importantes".

"La pastoral familiar que se realiza desde la comunidad cristiana debe adaptarse a los procesos de vida propios de la familia, en orden a su integración en la iglesia local y en la sociedad", señalan los prelados.

El Directorio afirma que la parroquia desempeña un papel específico en la pastoral familiar, "por ser el lugar más cercano a las familias concretas, que puede conocer más directamente sus necesidades y por ello prestar una atención mucho más directa y eficaz".

La Subcomisión Episcopal de Familia y Vida explica que la parroquia debe convertirse en un "verdadero hogar" donde las familias "se sientan acogidas, ayudadas y acompañadas". "Por eso, vivir en parroquia debe ser vivir en familia", destacan.

SOCIEDAD DESCRISTIANIZADA.

Familia y Vida de la Iglesia católica detalla que el ámbito de la colaboración entre la parroquia y la familia es la preparación a los sacramentos de la iniciación cristiana, algo "cada vez más urgente" en una "sociedad descristianizada".

"Por eso la renovación de la pastoral familiar exige la recuperación de la iniciación cristiana de los niños, los jóvenes e incluso los adultos, cuyo lugar propio es la parroquia", agregan los obispos de la comisión familiar.

En este punto señalan que la Iglesia, a través de las parroquias, acompañará a la familia en sus "acciones sagradas" (iniciación cristiana y educación en la fe de los hijos; adecuada preparación al matrimonio; celebración de este sacramento o acompañamiento a los esposos), pero no sólo en ellas, sino también "para los acontecimientos humanos y los problemas que les pueden superar".