MADRID, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
El frío y la nieve han vuelto a dar la bienvenida a la Península ibérica en el inicio del nuevo año, con temperaturas que podrán llegar este fin de semana a los 15 grados bajo cero en varios puntos de la meseta norte peninsular, una situación similar a la que se produjo a principios de 2009.
En opinión del jefe de Predicción de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Fermín Elizaga, "no es raro que se produzcan nevadas en esta época del año" aunque matizó que "la persistencia de estas borrascas atlánticas es más habitual en latitudes más bajas".
De todos modos, en declaraciones a Europa Press, insistió en que "no se pueden asociar estos fenómenos concretos al cambio climático" ya sus efectos "se traducen en cambios a largo plazo de las condiciones climáticas".
En las últimas horas, la entrada de aire frío del norte ha recrudecido la situación en España que, por el momento, arroja el balance de dos víctimas mortales en Pinos Puente (Granada) y Madrid, así como dificultades circulatorias por tierra, mar y aire.
Para hacer frente al temporal, el Ministerio de Fomento ha esparcido 6.000 toneladas de sal y 800.000 litros de salmuera en la Red de Carreteras del Estado. Por el momento, permanecen movilizadas 1.100 personas y 600 máquinas quitanieves.
A nivel internacional, la ola de frío polar ha provocado la cancelación de numerosos vuelos, así como una treintena de muertos en Alemania, Suiza y Polonia. Hace justo un año, una situación similar dejó una docena de muertos en el centro de Europa, además del consiguiente caos circulatorio, tanto a nivel nacional como internacional.