El prelado del Opus Dei invita a defender la "grandeza" de la familia ante "los grandes peligros y amenazas"
HUESCA, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Papa Benedicto XVI emplazó a los más de 38.000 peregrinos que se congregaron hoy en el santuario de Torreciudad (Huesca), con motivo de la celebración de la XVIII Jornada Mariana de la Familia, a "apreciar y custodiar la vida".
En su mensaje leído al término de la Santa Misa por el rector del santuario, Javier Mora-Figueroa, el Pontífice invitó a los padres a anunciar, "en medio del hedonismo y el relativismo imperantes", el Evangelio de la vida, "especialmente" donde la familia "es insidiosamente manipulada o dolorosamente despreciada".
Por su parte, durante la homilía, en la explanada del santuario _de 20.000 metros cuadrados y con una capacidad para 40.000 personas-- , el prelado del Opus Dei, monseñor Javier Echevarría, recordó que la familia es "imprescindible para la sociedad y para la Iglesia", por lo que destacó la necesidad defender su "grandeza" en momentos de "peligro y amenazas".
Asimismo, animó a los padres venidos de todos los puntos de España a "tener una descendencia numerosa" y "a conducirlos por la vida como buenos cristianos y, por tanto, como buenos ciudadanos". "Los hijos son lo más importante: más importante que los negocios, que el trabajo, que el descanso", añadió el prelado, recordando las palabras del fundador del Opus Dei, San Josemaría Escrivá de Balaguer, promotor de la construcción de este santuario ubicado a 70 kilómetros de la ciudad de Huesca.
En este sentido, monseñor Echevarría también impulsó a las familias a "desear ardientemente que el Señor llame a sus hijos a su servicio para lo que Él quiera, a través de una conducta sinceramente cristiana". "Éstos son los mejores tesoros que se guardan en los hogares", afirmó el prelado, quien insistió en que las familias numerosas son "hoy más necesarias que nunca".
"LOS QUE VIENEN UNA VEZ, REPITEN".
Por su parte, los peregrinos, la mayoría matrimonios jóvenes con hijos muy pequeños, coincidieron en señalar que quien asiste por primera vez al Santuario de Torreciudad, "repite".
Así, Lourdes, procedente de Barcelona y acompañada de su marido y sus cinco hijos, comentó que lleva asistiendo a estas jornadas más de 15 años. "Vivimos en una sociedad en la que la familia no está de moda, pero vienes aquí y te recuerdan que la sociedad vive gracias a la familia. Eso anima", aseguró la mujer.
En la misma línea, Cuca, llegada esta mañana muy temprano desde Zaragoza con su marido, sus hermanos y sus cinco hijos, indicó que la jornada era "un momento estupendo para encontrarse y compartir con otras familias".
Más de 300 voluntarios y casi doscientos sacerdotes asistieron a los peregrinos durante la jornada que llevó por lema 'La familia, santuario de la vida' y en la que no faltaron actuaciones musicales por parte de grupos y asociaciones asistentes.
Además, un dispositivo especial de Cruz Roja y Protección Civil estuvieron a cargo de la atención sanitaria. También intervinieron varias móviles de la Guardia Civil de tráfico para facilitar el acceso de los más de los 248 autobuses que trasladaron a los peregrinos hasta Torreciudad.
El santuario de Torreciudad, dedicado a la Virgen de los Ángeles, cuya talla del siglo IX ya era venerada en la antigua ermita sobre la que se construyó este nuevo templo, inaugurado en 1975, recibe la visita de unos 300.000 peregrinos al año.
