MADRID/ROMA, 21 Feb. (EUROPA PRESS/C. Giles) -
El Papa Benedicto XVI anunciará, previsiblemente mañana durante la audiencia general del miércoles, la convocatoria de su primer Consistorio Cardenalicio, según la prensa, que fija mayoritariamente como fecha para la celebración del mismo el próximo el 25 de marzo.
Aunque se han barajado varios nombres de españoles, el del vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y arzobispo de Toledo, monseñor Antonio Cañizares, es el que suena con más fuerza.
Se tratará, según la prensa, de un "pequeño" consistorio, ya que se cree que serán sólo una docena los nuevos cardenales. Y es que Benedicto XVI no quiere, por el momento --aunque no lo ha descartado para más adelante--, que se supere el número de los 120 purpurados menores de 80 años, techo máximo de un cónclave para la elección del Pontífice fijado por Pablo VI. Actualmente los cardenales electores, es decir los menores de 80 años, son 110, pero el número descenderá en los próximos meses, ya que, por ejemplo, el 24 de marzo el cardenal Desmond Connel de Dublín festejará su 80 cumpleaños.
Los medios de comunicación fijan mayoritariamente en el 25 de marzo como fecha para la ceremonia del Consistorio, coincidiendo con la celebración de la Anunciación de la Virgen, pero algunos muestran su perplejidad ante este anuncio debido a que generalmente este tipo de ceremonias no tienen lugar durante la Cuaresma.
Para avalar la próxima celebración del Consistorio, algunas noticias se hacen eco de que los anillos de oro que se entregarían a los nuevos cardenales --y de los que se ocupa la Secretaría de Estado-- están preparados. También estarían trabajando, a tenor de las mimas informaciones, las tiendas romanas que se encargan de hacer los trajes para los nuevos cardenales.
El Código de Derecho Canónico, conjunto de leyes que regula la vida de la Iglesia y que fue promulgado por el Papa Juan Pablo II en 1983, explica, concretamente en el canon 351, que los cardenales son elegidos libremente por el Papa, entre varones (normalmente obispos, aunque también pueden ser simples sacerdotes) que "destaquen notablemente por su doctrina, costumbres, piedad y prudencia en la gestión de los asuntos".
En el octavo y último Consistorio convocado por Juan Pablo II, el 21 de octubre de 2003, fueron nombrados 31 nuevos cardenales, de los cuales dos eran españoles (el del Opus Dei Julián Herranz, actual presidente del Consejo Pontificio, y Carlos Amigo Vallejo, arzobispo de Sevilla) y uno era 'in pectore' (en secreto y puesto que el Papa no comunicó su nombre antes de fallecer el 2 de abril de 2005, no pudo participar en el cónclave que eligió a Benedicto XVI).
RANKING
Ahora, con el Consistorio, que normalmente Juan Pablo II celebraba cada dos o tres años, comenzarán a apreciarse las verdaderas decisiones de Benedicto XVI. El ranking de nombres de los que podrían recibir la birreta cardenalicia está encabezado por el arzobispo norteamericano William Joseph Levada, que sustituyó a Ratzinger como presidente de la Congregación para la Doctrina de la Fe. Al ser el 'guardián' de la ortodoxia católica, la birreta roja se le concede por tradición.
Entre los españoles, el nombre que suena con más fuerza es el del vicepresidente del Episcopado y arzobispo de Toledo, monseñor Antonio Cañizares Llovera, muy estimado por Benedicto XVI. Pero también suenan entre los vaticanistas los nombres de monseñor Lluis Sistach, arzobispo de Barcelona, y de monseñor Agustín García Gasco, arzobispo de Valencia, aunque ha cumplido el pasado 12 de febrero los 75 años de jubilación de los obispos y miembros de la Curia y ha presentado la preceptiva carta al Papa.
En este sentido, el Papa podría derogar la normativa de Pablo VI que fija esta edad, lo que permitiría al español Julián Herranz continuar como presidente del Consejo Pontificio y al colombiano Darío Castrillón en la Congregación para el Clero. No en vano, el Papa cumplirá 79 años el 19 de abril y fue elegido con 78 años.
Las apuestas también se centran en monseñor Stanislao Dziwizs, el secretario del Papa Juan Pablo II durante 26 años y actualmente nombrado arzobispo de Cracovia. Otros nombres que se barajan para entrar en el Colegio Cardenalicio son los siguientes miembros de la Curia: el prefecto de la Congregación de los Religiosos, el esloveno Franc Rodè; el prefecto del Tribunal de la Signatura Apostólica, Agostino Vallini; o el presidente del Pontificio Consejo para los Laicos, el polaco Stanislaw Rylko, también muy cercano a Juan Pablo II.
También se habla del arcipreste de la Basílica di San Pedro, Angelo Comastri, y de la basílica di San Pablo, Andrea Cordero Montezemolo, así como el presidente del Sínodo de los Obispos, el croata Nikola Eterovic, y el presidente del Consejo Pontificio 'Cor Unum', Josef Cordes. Fuera de la Curia Romana los nombres que más resuenan son el arzobispo de Bolonia, Carlo Caffarra; el de Boston, Patrick Òmalley; y el de Paris, Andrè Vingtrois.