MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -
El PSOE en el Congreso de los Diputados insta al Gobierno a que, antes de proceder a cualquier modificación al alza de los límites de velocidad en vías rápidas, consensúe con los demás grupos parlamentarios y con las asociaciones de víctimas de tráfico la medida.
Se trata de una proposición no de ley, a la que ha tenido acceso Europa Press, en la que pide igualmente el análisis de los informes de expertos que evalúan las consecuencias que tiene el incremento del límite de velocidad en la seguridad vial, el gasto en combustible y el medio ambiente.
En caso de no alcanzar los consensos necesarios o de que los informes de los expertos prevean consecuencias negativas en cuanto a la incidencia en la seguridad vial, el medio ambiente, o el gasto en combustible insiste en que se renuncie a cualquier incremento de la velocidad.
La Dirección General de Tráfico (DGT) está trabajando en la reforma del vigente Reglamento General de Circulación, que estudia aumentar a 130 kilómetros por hora la velocidad en algunos tramos de autopistas y autovías, y reducirla en algunas zonas de ciudad a 30 kilómetros por hora.
En concreto, el PSOE explica que este aumento del límite de velocidad será autorizado y gestionado exclusivamente por la Jefatura Central de Tráfico, salvo en Cataluña y País Vasco que tienen la competencia autonómica en la materia.
RIESGOS DEL AUMENTO DE VELOCIDAD
De hecho, el PSOE recuerda que el exceso de velocidad es una de las principales causas de muerte en las carreteras y, por ello, en la UE se ha desarrollado una política exhaustiva de control de la velocidad.
Según se desprende del estudio de Nilson, avalado por la Organización Mundial de la Salud y el Observatorio Europeo de Seguridad Vial, el PSOE sostiene que una reducción del 5 por ciento en la velocidad media supone una reducción aproximada del 10 por ciento de los accidentes con heridos y del 20 por ciento de los accidentes mortales.
En cambio, advierte de que un aumento del 5 por ciento en la velocidad media supone un aumento aproximado del 10 por ciento de los accidentes con heridos y del 20 por ciento de los accidentes mortales.
Pero además de lo anterior, indica que el aumento del límite de velocidad máxima hasta los 130 kilómetros por hora en algunos tramos de vías rápidas, autovías y autopistas disparará el consumo de petróleo y, con ello, las emisiones de gases de efecto invernadero, al tiempo que aumentará también la deuda exterior y, con la que está cayendo, el país no puede permitírselo.
En este sentido, apunta a diferentes estudios e investigaciones que indican que la reducción de la velocidad de circulación de los vehículos en autopistas y autovías disminuye considerablemente el consumo de combustible.
Por ejemplo, hace referencia a un trabajo del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) que certifica que la reducción de la velocidad en 10 kilómetros por hora ahorra hasta un 11 por ciento de combustible y, teniendo en cuenta que un litro de gasolina produce 2,32 kilogramos de C02 y uno de diesel, 2,68 kilos, circular más despacio no sólo ahorra combustible, también se contamina menos.
Es más, recuerda que España se gastó 770 millones de euros en comprar derechos de emisión de C02 entre 2008 y 2012, y se convirtió en el segundo país, tras Japón, que más derechos de emisión de dióxido de carbono ha comprado debido al alto consumo energético de su transporte, ciudadanos y hogares.
"Este aumento de la velocidad máxima va a provocar mayores emisiones en el transporte, al tiempo que va en contra del objetivo de la UE de reducir en 2020 un 20 por ciento las emisiones de gases de efecto invernadero. No somos productores de petróleo y debemos tomar medidas que favorezcan la reducción de consumo y de emisiones", concluye el Grupo Socialista.
