Actualizado 18/04/2015 11:45

Receta de huevos a la Florentina

Receta de huevos a la Florentina
Foto: VIA MAGNA
 

MADRID, 18 Abr. (Vía Magna, International School of Hospitality and Tourism) -

Dentro de la gastronomía, el término francés "à la florentine" (y derivados) se usa para denominar platos que llevan espinacas. El ingrediente principal puede ser huevo, pescado o carne blanca, normalmente sobre una base de espinacas y cubiertos con salsa bechamel o mornay.

Los huevos Florentina forman parte de la cocina clásica y existen miles de variantes de los mismos. La receta que presentamos es una variante ligera (sin nata ni mantequilla) utilizando cazuelitas de barro que se introducen en el horno.

Plato de la cocina clásica realizado sobre una base de espinacas a la que se añade huevo y bechamel.

INGREDIENTES: (4 comensales)

500 gr. de espinacas
80 g de orejones
45 g de almendras
2 dientes de ajo
35 g de harina
500 ml de leche
1 cebolla pequeña
1 longaniza
8 huevos
queso rallado
nuez moscada
aceite de oliva
sal

Receta de huevos a la Florentina

PREPARACIÓN:

En una olla grande, ponemos  a hervir agua y sal. Cuando esté hirviendo, añadimos las  espinacas y vamos comprobando si hace falta añadir más sal. En cuanto estén hervidas, las ponemos en un escurridor y reservamos.

Mientras se escurren las espinacas, cortamos los orejones en trozos pequeños utilizando la técnica de corte bastón.

El siguiente paso es: en una cazuela grande, con un poco de aceite, doramos las almendras (fileteadas muy finas) y en cuanto estén doradas, añadimos el ajo y luego las espinacas comprobamos el punto de sal.

Incorporamos los orejones y la harina (cubriendo) hasta que no se vea. Posteriormente, añadimos poco a poco la leche y, en cuanto esté integrada, probamos para ver cómo está de sal. Para terminar, añadimos un poco de nuez moscada en polvo y retiramos del fuego.

Para poder darle un poco más de decoración al plato y que nos quede  más bonito, a parte se prepara una bechamel. En una sartén ponemos aceite y cebolla rallada y en cuanto la cebolla esté dorada añadimos la  harina, removemos y vamos añadiendo la leche. Continuamos removiendo hasta conseguir una textura homogénea y fina

Para presentar el plato podemos utilizar cazuelitas de barro individuales, se untan con mantequilla (para que no se pegue)

Rellenamos un cuarto de superficie con las espinacas. Añadimos unos trozos de longaniza en cada cazuelita, luego se pone en medio 2 huevos, un poco de sal por encima y queso, y se mete al horno unos minutos hasta que veamos que el huevo está hecho

VARIACIONES

Si no disponemos de horno, podemos hacerlo con huevos poché y añadir por encima salsa mornay (que incorpora queso a la bechamel). Siempre deliciosos.

Servimos con pan tostado. Perfectos acompañados de un buen vino blanco y una alegre conversación con nuestros amigos.

Tradición culinaria: Francesa

VIA MAGNA