S. Santa.- El arzobispo castrense afirma en su pregón que Jesucristo ama y comprende todas las "historias humanas"

Actualizado: lunes, 2 abril 2007 15:08

MADRID, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

El arzobispo castrense de España, Francisco Pérez González, asegura en su pregón de Semana Santa, pronunciado ayer, que "no hay historia humana que no haya sido amada, comprendida, perdonada, salvada y elevada" por Jesucristo, además de que "no hay pasión por la que Él no haya pasado ni atisbo de felicidad que Él no haya otorgado".

Según señaló, Cristo se ha unido a "toda suerte, toda muerte y todo destino" de todos los hombres. "No hay suerte que Él no haya permitido u otorgado, ni muerte que no haya unido a su muerte, ni destino del hombre que no haya sido por Él llevada a la esperanza de la resurrección", señaló.

"No hay, en definitiva, historia humana que en la pupila de sus ojos no haya sido amada, comprendida, perdonada, salvada y elevada por Él", afirmó. El arzobispo castrense señaló asimismo que Jesucristo ha abierto toda prisión "interior o exterior", así como que Jesucristo "ha hecho suya" toda "tiniebla, oscuridad, silencio, desesperación, soledad o sinsentido".

Francisco Pérez González señaló que Cristo ha "puesto su mirada" y "entrado" en todas las casas, calles, naciones, familias y sociedades, en la que ha "acompañado a sus habitantes", a los que ha "salvado para siempre en espera de la patria celeste". Según señaló, todas las inseguridades, incomprensiones, persecuciones y torturas de todas las personas los ha sumado Cristo "a esa cuenta que los teólogos llaman la 'economía de la salvación'", ya que Él es "el humanamente más abandonado, incomprendido, incriminado, perseguido y torturado, hasta ser llevado a la cruz".

Además, tampoco hay "gesto de amor humano, pan repartido, sonrisa regalada o dolor ofrecido por los demás, que él no haya multiplicado hasta la infinita y sublime altura de su amor redentor", aseguró.

El arzobispo castrense pronunció su pregón de Semana Santa en Navalcarnero, y saludó a los sacerdotes presentes, a la Cofradía de Jesús Cautivo por Amor, a la Hermandad de la Soledad y a las autoridades convocadas.

El arzobispo afirmó asimismo que los días de Semana Santa son "siempre unívocos y provocativos en el contexto cultural de silenciamiento de nuestras raíces cristianas". En su opinión, "somos convocados a la visión de un espectáculo completamente distinto a cualquier otro espectáculo": es, según afirmó, "el espectáculo del Amor con mayúsculas, del amor del Dios que es amor, el drama que resuelve por fin la historia de relación entre Dios y el hombre, del amor infinito de Dios por el hombre".