MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
Frente al ¡Hecha la ley, hecha la trampa!, la Dirección General de Tráfico tiene intención de penalizar la compraventa de puntos del carné de conducir para evitar la pérdida del permiso en caso de acumulación de infracciones. Aunque se están preparando medidas para evitar esta emergente práctica, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró hoy que no han detectado un mercado negro con este propósito. Sin embargo, en Internet proliferan ofertas que oscilan entre 250 y 1.000 euros el punto.
Asi lo aseguró hoy en el pleno del Senado la parlamentaria del PNV Elena Etxegoyen, que expresó al ministro del Interior sus temores a que, a medida que se vayan concretando los expedientes abiertos de pérdida de puntos, lo que hasta hoy ha sido considerado "anecdótico" por la Dirección General de Tráfico, pueda convertirse en un "serio problema" si es minusvalorado.
Etxegoyen denunció la proliferación en Internet de ofertas de puntos del carné a conductores infractores por cantidades nada desdeñables, en anuncios en los que no se tiene reparo en ofrecer teléfonos o correos electrónicos de contacto.
Según explicó en su intervención durante la sesión de control al Gobierno, la picaresca consiste en que el individuo A que tiene carné de conducir pero que no tiene coche ni lo necesita dispone de doce puntos, pero que tampoco necesita, y los oferta en venta; y el individuo B que, además de tener carné y coche, los necesita, comete una infracción que se castiga con multa y retirada
de puntos; tantos puntos menos, sí, pero del carné del inidividuo A, que se autoconfirma conductor infractor ante la administración correspondiente y firma alegremente la multa por un importe que le reintegra el individuo B, acompañado eso sí por una suculenta prima que oscila, hoy por hoy, entre los 250 y los 1.000 euros por punto.
La senadora relato que han surgido igualmente otras ingeniosas variantes del asunto, como la de los que venden los puntos del carné de algún familiar, generalmente ancianos, que ni siquieran llegaran a saber que los han perdido, ni tendrán que renovar su permiso de conducir. Otra variante es la de aquel que, identificando al vehículo, pero no al infractor, aporta los datos de un conocido de nacionalidad extranjera que no reside en España al que solo podrá multarse sin restarle punto alguno si la regulación nacional es diferente a la española.
INTERIOR DICE NO TENER CONOCIMIENTO
En su intervención, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, dijo que el tema no es nuevo, porque siempre ha existido la picaresca de que cuando no se identifica al infractor se trata de poner a otro en lugar del que conducía, si bien la tecnología va cada vez más contra el pícaro y a favor de la ley.
El ministro negó la mayor, y aseguró que no tienen en su departamento noticia de que esté funcionando el mercado negro, y vaticinó poco éxito en caso de que lo haga, ya que en otros países con carné por puntos no lo ha hecho y al final "resulta más económico recuperar el carné por lo legal". Además, dijo que sólo puede producirse en infracciones donde no se identifica al conductor, un número pequeño del conjunto.
En todo caso, admitió que se están preparando las medidas para combatir este fraude en caso de que se produzca: se ha preguntado a otros países de Europa cómo lo han evitado, se hace un control de seguimiento de efectividad de sancionos, y "en su caso, introduciremos los elementos penales y administrativos oportunos para corregir este mercado". Rucalcaba destacó que el carné por puntos ha demostrado su eficacia con un 16,6 por ciento menos de accidentes mortales menos en sus tres primeros meses, lo que supone 161 muertos menos.