CHERNÓBIL, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
Ucrania rindió hoy homenaje a las víctimas del desastre de Chernóbil, tras cumplirse 20 años del peor accidente nuclear de la historia, con campanas, ceremonias y debates parlamentarios sobre lo mucho que todavía el país no sabe y lo mucho que tiene hacer para llevar el consuelo a los millones de personas afectadas.
En una ceremonia en Kiev estuvo presente el presidente ucraniano, Viktor Yushchenko, que tiene previsto visitar hoy la central nuclear de Chernóbil para rendir homenaje a las personas llegadas de toda la URSS para hacer frente a las consecuencias de la explosión, los llamados 'liquidadores'.
Decenas de personas se congregaron en la localidad de Chernóbil, a 18 kilómetros de distancia de la central, para reunirse con antiguos amigos. "Que Dios no permita que esto se repita, que Dios no haga que nuestros nietos vuelvan a vivir esto", declaró Valentyna Mashina, de 55 años, cerca del monumento en memoria de las víctimas en Chernóbil, donde todavía residen 4.000 personas --aunque no más de dos semanas cada vez-- para trabajar en la zona más altamente contaminada.
Mientras, en el Parlamento se celebró una sesión especial dedicada al accidente. El viceministro de Emergencias, Volodymyr Kholosha, prometió que la labor de su departamento "está sobre todo dirigida a las personas afectadas, su sustento, su salud, su seguridad". Muchos diputados pidieron más ayuda para los millones de afectados y más información para responder a las cuestiones todavía pendientes sobre las consecuencias del accidente.
Esta madrugada, en Kiev y Slavutich, la localidad construida para albergar a los trabajadores desplazados de Chernóbil, cientos de personas con claveles rojos y velas se congregaron ante los monumentos en memoria de las víctimas, mientras las campanas replicaban y las sirenas sonaban a la 1:23 horas, momento exacto en el que el 26 de abril de 1986 el reactor número cuatro explotó enviando nubes de radiación que se extendieron por la antigua Unión Soviética y Europa.
En Slavutich, los actos comenzaron una hora antes para coincidir con la hora de Moscú, que era la que se utilizaba en el momento del accidente en la República Socialista Soviética de Ucrania.