Los 18 detenidos en Madrid por ocupar el 'banco malo' prestan declaración mientras una concentración pide su liberación

Actualizado: jueves, 21 marzo 2013 22:15

MADRID, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los 18 activistas antidesahucios detenidos este jueves por allanamiento de morada y resistencia y desobediencia a la autoridad por ocupar las oficinas de Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración bancaria (Sareb), conocida como 'banco malo', están prestando declaración en la comisaría de Tetúan, mientras alrededor de 70 personas se concentran en el exterior pidiendo su liberación.

Un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid ha indicado a Europa Press que los detenidos han sido finalmente 18 y no 30, como adelantaron en un principio.

Además, estas fuentes policiales han explicado que los activistas se encuentran tomando declaración en estos momentos --pasadas las 21 horas-- en la comisaría de Tetúan, situada en la Plaza de Remonta, y que previsiblemente prestarán declaración también mañana por la mañana.

Por su parte, un portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) ha explicado que frente a la comisaría se encuentran concentradas alrededor de 70 personas que piden la liberación de los detenidos. "Estas son nuestras armas" o "Sí, se puede" son algunos de los gritos que claman los manifestantes.

PROTESTAN DESDE ESTA MAÑANA

Las personas que se encuentran concentradas frente a la Comisaría de Tetúan comenzaron sus protestas frente a los Juzgados de Plaza de Castilla en apoyo a quince activistas de 'Stop Desahucios', juzgados por desórdenes públicos por ocupar el pasado noviembre una sucursal bancaria en defensa del derecho de la vivienda, y que han sido absueltos.

Tras la concentración en Plaza de Castilla, los manifestantes se han desplazado a las oficinas de Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración bancaria (Sareb), conocida como 'banco malo' y situadas en el número 89 del madrileño Paseo de la Castellana.

Allí los manifestantes entraron a las 13 horas en tromba a la oficina con pancartas y gritando para exigir a esta organización que cumpla "las promesas de alquiler social" que los bancos habían realizado a las viviendas que habían adquirido.

En torno a las 14.45 horas se encontraban concentradas 70 personas en el lugar en actitud pacífica, 30 en el interior del recinto y 40 en el exterior. Varias unidades de agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) se acercaron al lugar de los hechos, han indicado las fuentes policiales.

Sobre las 15 horas, el director de la Sociedad interpuso una denuncia porque uno de los ocupantes realizó una pintada en el interior del local. Posteriormente interpuesto otra denuncia por un delito de allanamiento de morada.

Ante ello, los agentes informaron a los activistas de esta situación y les advirtieron de que debían desalojar el edificio si no querían ser detenidos. Ante su negativa a hacerlo y a identificarse, los policías han arrestado a las 30 activistas antidesahucios, que han sido trasladados a la comisaría de Tetuán.

PETICIÓN DE REUNIÓN

Por su parte, un portavoz de la PAH ha indicado a Europa Press que la intención de los concentrados ha sido la petición al SAREB para que negocie los alquileres y que, en caso de que no pueda hacerlo, les facilitara un escrito que lo certifique para que los afectados puedan continuar los trámites dirigidos a parar los desahucios.

"No nos han dado el escrito", ha asegurado este portavoz, quien ha añadido que "lo único que ha ofrecido la institución es una reunión el lunes, a condición de que desalojaran la entrada". Los concentrados se han negado a irse y han pedido una confirmación escrita de la reunión.

"Las familias y los abogados habíamos negociado con entidades bancarias el alquiler social y cuando solo faltaba firmarlo, nos dijeron que la vivienda había pasado al banco malo y que ya no se podía hacer nada", ha explicado, en declaraciones a Europa Press, uno de los portavoces.

Este miembro del movimiento antidesahucios se ha quejado de que los bancos tratan a los afectados por las hipotecas como una "pelota de ping-pong, para arriba y para abajo". "Las entidades bancarias se desentienden y dicen que, a pesar de los acordado, no pueden cumplir su acuerdo porque ahora las viviendas han pasado al banco malo y allí nos dicen que no pueden hacer nada porque depende de la sucursal", ha precisado.