Ayuntamiento confirma que el edifico derrumbado tenía 50 años, una edad "muy prudente" para la vida útil de un inmueble

PALMA DE MALLORCA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Ayuntamiento de Palma confirmó hoy que el edificio derrumbado esta madrugada en la calle Rodríguez Arias de la capital balear tenía 50 años de antigüedad, al haber sido levantado en 1959, una edad "muy prudente" para la vida útil de un inmueble.

Así lo señaló en rueda de prensa la regidora de Urbanismo, Yolanda Garví, quien remarcó que el edificio no estaba obligado a pasar la Inspección Técnica de Edificación (ITE) porque no le correspondía por antigüedad, de modo que, según dijo, habría sido un "hecho extraordinario" su demolición.

Garví, que compareció en el lugar donde se ha producido la tragedia, junto al concejal de Infraestructuras, Francisco Donate, indicó que el registro municipal del Consistorio no ha recibido ninguna denuncia previa sobre el estado del edificio siniestrado, ni ningún expediente de infracción o protección del mismo.

Al respecto, precisó que los últimos expedientes relativos al inmueble derrumbado corresponden al año 2003 y hacen referencia a la reforma de la cocina y coladura del segundo piso, por lo que, según la responsable de Urbanismo municipal, no había nada que hiciera sospechar que su estructura estuviera en peligro.

En este sentido, Garví añadió que los dos propietarios de la planta baja y primer piso del edificio en cuestión, que son aparejadores, no habían observado "nada extraño ni anomalía que les hicieran prever este triste acontecimiento".

DESALOJO DE MEDIO CENTENAR DE VECINOS

Por su parte, Francisco Donaire confirmó que esta madrugada han sido desalojados dos edificios cercanos al inmueble siniestrado, donde residían 15 y 5 personas respectivamente. A estos vecinos, se les están uniendo a esta hora los residentes de otro edificio adyacente y del que está justo enfrente del número 21 de la calle Rodríguez Arias, que están habitados por 30 personas aproximadamente.

Este desalojo se debe a razones de seguridad, dado que, según indicó el regidor, está previsto que una vez que culminen las tareas de desescombro se proceda a la demolición total de los restos de la estructura del edificio que se ha venido abajo esta madrugada. Todas estas personas serán realojadas por los servicios sociales municipales en pensiones o pisos de titularidad municipal, explicó.

Por último, el titular de Infraestructuras en Cort apuntó que "existe la posibilidad de que se encuentre una persona más entre los escombros que, al parecer, no vivía en el inmueble", ya que un trabajador de la empresa Emaya, que pasaba por la calle en el momento del derrumbe, "creyó ver un transeúnte que transitaba por las inmediaciones del inmueble siniestrado", explicó al respecto.

Ambos responsables municipales apuntaron que en el Ayuntamiento están consternado por lo ocurrido, aunque mantienen la esperanza de que todavía pueda haber supervivientes. En las tareas de desescombro están trabajando unos 60 bomberos que retiran "piedra a piedra" los restos del edificio, ante el riesgo de que pueda supervivientes.