Los bancos marisqueros del fondo de la ría de Pontevedra sufren graves daños debido a las riadas

PONTEVEDRA 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

Las riadas que se produjeron en los últimos días en Galicia como consecuencia de las abundantes lluvias han provocado graves daños en los bancos marisqueros del fondo de la ría de Pontevedra, en los que se ha detectado una elevada mortandad de los moluscos, de los que el más afectado ha sido el arenal de Combarro, en Poio.

El patrón mayor de la cofradía de San Telmo, de Pontevedra, Miguel Pazos, señaló que "la mitad" de esta zona productiva ha desaparecido bajo toneladas de lodo, piedras y troncos. Además, el banco marisquero de Ameixal, en Lourido, ha padecido los efectos del temporal, en gran parte por el aporte excesivo de agua dulce, que afectó al berberecho.

Con todo, Pazos avanzó que las pérdidas económicas no se podrán precisar hasta dentro de, al menos, 15 días, cuando la situación se haya normalizado. No obstante, dio por seguro que "se ha perdido la campaña navideña de este año" y vaticinó que, "hasta dentro de dos años, no se habrá conseguido regenerar la zona", ya que la mitad del banco marisquero ha quedado sepultado bajo una capa de un mínimo de 30 centímetros de lodo.

El patrón mayor de San Telmo explicó que la Consellería de Pesca enviará mañana técnicos de Tragsa para comenzar a retirar los restos procedentes de la riada. Además, el diputado del BNG Bieito Lobeira visitó esta tarde la zona, para conocer 'in situ' los efectos de la riada.

Asimismo, una bióloga de zona de la Consellería de Pesca y el asistente técnico de la cofradía colaborarán en la elaboración de un informe para determinar las pérdidas. Miguel Pazos adelantó que las partes altas de las zonas 1 y 2 de marisqueo, en las que había importantes zonas de siembra de cría de almeja fina, han sido las más afectadas y ya se dan por perdidas.

Además, Miguel Pazos explicó que la regeneración de los bancos marisqueros será complicada, debido a que los viveros carecen de cría de molusco, lo que obligará a los mariscadores a rehabilitar los arenales "con sus propios medios y poco a poco".