GRANADA, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los cadáveres de los tres ciudadanos británicos que ayer fueron encontrados por agentes del Servicio de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil en Sierra Nevada permanecen en el Instituto Anatómico Forense de Granada, después de que se les practicara la autopsia y a la espera de que el Juzgado de Instrucción número 1 de Orgiva ordene su repatriación, según informaron a Europa Press fuentes diplomáticas.
Los cuerpos sin vida de Colin Riddiouch de 46 años, y sus amigos, Paul Dick de 56 años y John Plews de 30 años fueron encontrados ayer en el Collado del Mulhacén, después de que el hijo de Colin Riddiouch consiguiera llegar hasta Capileira para pedir ayuda, tras haberlos dejado en un agujero excavado en la nieve al ser sorprendidos por una fuerte ventisca.
Según las fuentes consultadas, los tres ciudadanos británicos residían en el Condado de Cliveland. Ninguno de sus familiares se han desplazado hasta Granada para hacerse cargo de los cuerpos, si bien no es necesario ya que desde el consulado se facilitan todos los trámites para la repatriación.
En la embajada británica se encuentran a la espera de que los familiares decidan, una vez se autorice la repatriación por el juzgado, cómo se va a hacer ésta.
El Juzgado número 1 de Orgiva ha abierto una investigación sobre la muerte de los tres ciudadanos británicos, que al parecer les sobrevino por una hipotermia causada por las bajas temperaturas de hasta 20 grados bajo cero que se registraban en el macizo montañoso de Sierra Nevada.
