GIRONA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra detuvieron la semana pasada en Roses (Girona) a cinco personas por transportar desde Málaga en un velero dos toneladas y medio de hachís para su supuesta distribución en Catalunya, según informó la Policía autonómica.
Los detenidos, de nacionalidad británica y holandesa, formaban parte de una organización internacional que los Mossos d'Esquadra investigaba desde el año pasado en colaboración con la Agencia Tributaria, tras detectar que una de las bases operativas de la banda se encontraba en Roses.
Allí, los agentes localizaron una casa situada en el barrio residencial de Santa Margarida y con acceso directo desde un canal que los delincuentes podrían estar utilizando para almacenar y distribuir la droga, según los indicios recogidos en una de las lanchas que empleaban.
Sin embargo, la investigación, denominada 'Corleone', se alargó porque los sospechosos no residían en la vivienda vigilada y de hecho pasaban largas temporadas sin visitarla, por lo que no fue hasta el pasado 20 de junio cuando se pudo detectar la llegada de un velero con un posible nuevo cargamento de droga.
La embarcación había zarpado cinco días antes del puerto malageño de Benalmádena en dirección al cercano de Estepona, según declararon sus tripulantes a las autoridades portuarias, aunque el velero no llegó nunca al destino previsto, sino que se dirigió hacia Roses.
La noche del 21 de junio un dispositivo de vigilancia apostado junto a la casa del barrio de Santa Margarida permitió comprobar cómo cuatro hombres y una mujer descargaban numerosos fardos, que a continuación introducían en la casa.
Tras solicitar una orden judicial, los agentes entraron en el domicilio y detuvieron las cinco personas, tres hombres y una mujer de nacionalidad británica y de entre 25 y 35 años y un hombre holandés de 40 años, todos ellos con domicilio en el extranjero.
En el interior de la casa descubrieron 134 fardos con dos toneladas y media de hachís y se intervino el velero investigado y el coche que empleaba el grupo.
Los detenidos pasaron a disposición del juzgado de guardia de Figueres, que decretó su ingreso en prisión por un delito contra la salud pública. El juzgado ha dictado el secreto de sumario de las actuaciones, ya que la operación sigue abierta.
