BARCELONA 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Barcelona, Joan Clos, consideró "mejorable" la actuación de la Guardia Urbana y de los Mossos d'Esquadra en los incidentes del barrio del Raval, durante la madrugada del pasado sábado, y aseguró que ambos cuerpos "están evaluando todo lo que sucedió para aprender las lecciones".
En una entrevista a Cataluña Radio recogida por Europa Press, Clos señaló que "evidentemente todos somos autocríticos y exigentes con nuestras responsabilidades y miraremos de aprender de los posibles errores".
Clos defendió la actuación de la Guardia Urbana en el control del 'botellón' que se celebró en la Rambla del Raval porque "se realizaron los pertinentes operativos de vigilancia" y "se desarrolló sin ningún problema".
No obstante, aseguró que el problema surgió con los alborotos que se produjeron a partir de la 1.30 horas de la madrugada y que forzaron a la intervención de los antidisturbios de los Mossos d'Esquadra.
En este sentido, reconoció que ello "sorprendió" a ambos cuerpos policiales, debido al "elevado grado de organización" de este grupo de violentos. "Parece ser que llevaban algún producto incendiario y que, incluso, había personas ubicadas en los tejados que se comunicaban entre ellos", señaló.
Clos señaló que "estudiaremos, analizaremos lo sucedido para que se pueda controlar mejor en los casos que lamentablemente se producirán". "Seguramente habrá nuevas ocasiones, como una convocatoria del FC Barcelona, una manifestación antisistema o una fiesta 'rave' en las que actuará este grupo de personas violentas", precisó.
El alcalde insistió en que "todo es mejorable" y si "se han provocado estos incidentes no nos podemos sentir del todo satisfechos". "La próxima vez miraremos de hacerlo mejor y pondremos todos los medios para que esto no se repita", prometió.
En su opinión, para afrontar este tipo de conflictos, es "cuestión de tener información previa", algo que compete a los Mossos, y "a veces, no se puede tener porque estos grupos se estructuran bien y no lo puedes saber".
Respecto a la actuación de los Mossos y su coordinación con la Guardia Urbana, Clos explicó que "la Policía Local y los Mossos están mejorando muy rápidamente y que la unidad de mando conjunto está dando en general resultados muy positivos".
"Esta vez el resultado no ha sido tan brillante como nos hubiera gustado" pero "el problema más grave que tenemos en Barcelona no es el de la eficacia policial, sino que haya arraigado este grupo de violentos, que actúa sistemáticamente", según Clos.
GRUPO VIOLENTO "DIFÍCIL DE DETENER".
Respecto a este colectivo de violentos, el alcalde señaló que este colectivo es "muy complicado de detener, porque hay que aplicar todos los procedimientos con las leyes democráticas en la mano, para que se consigan pruebas suficientes y el juez pueda actuar".
En este sentido, avanzó que con la aplicación de la ordenanza sobre civismo, "se podrán imponer sanciones", vía administrativa, para "recuperar el valor de los daños ocasionados en el barrio del Raval", explicó.
Clos señaló que "la mitad de estas personas violentas son extranjeras" y sus acciones "se vinculan al consumo de alcohol y de drogas". "El movimiento 'okupa' participa, pero es una suma de distintos movimientos que disfrutan con la violencia", apuntó.
"ES EL PRECIO QUE HAY QUE PAGAR POR SER UNA CIUDAD COSMOPOLITA".
Respecto a las causas que hayan podido originar el arraigo de este colectivo en la ciudad, consideró "probable el hecho de que una ciudad cosmopolita, abierta y mediterránea haya atraído a un pequeño porcentaje de gente que es muy violenta".
"Se trata de un precio que debemos pagar por ser una ciudad que atrae a tantos estudiantes, que genera tanta actividad y que vive de día y de noche", según Clos, quien señaló que "no por ello debemos renunciar a ser una ciudad cosmopolita".
"Lo que hay que hacer con este grupo de violentos es controlarlos, estudiarlos, analizarlos y perseguirlos con los instrumentos democráticos" y "con unas fórmulas policiales que tenemos que ir perfeccionando en el futuro", señaló el alcalde.
LIMITAR LA CONCENTRACIÓN DE BARES EN EL RAVAL.
Respecto a las peticiones de los vecinos del Raval, que ayer reclamaron congelar la apertura de bares en la zona, Clos aseguró que con el plan de usos "miraremos de limitarlo" para que "no se produzca una concentración de este tipo de establecimientos".
En referencia al hecho de que el Ayuntamiento de Barcelona hubiera trasladado la celebración del 'botellón' al Sot del Migdia o al recinto del Forum, Clos señaló que la convocatoria del viernes "fue totalmente anónima", por lo que el Consistorio "no se planteó" esta posibilidad, porque "no hubo nadie que convocara".
"Ello no se puede tolerar en la sociedad actual, porque se habría convertido en una ocupación ilegítima del espacio público". "Existe una ordenanza y hay que aplicar el sentido común", sentenció el alcalde, quien aseguró que para realizar este tipo de convocatorias "debe haber alguien que se responsabilice".